Para el candidato presidencial Andrés Manuel López Obrador es mejor no tener TLCAN que un mal acuerdo y además insistiría en ser parte de las negociaciones comerciales si es elegido, dijo uno de sus altos asesores económicos.
AMLO presionaría para que las conversaciones de renegociación permanezcan trilaterales, esto luego de que un asesor económico del presidente estadounidense Donald Trump dijo que la Casa Blanca está considerando seriamente buscar negociaciones separadas entre México y Canadá, dijo Gerardo Esquivel en una entrevista con Bloomberg TV en Nueva York
Tras perder en una polémica elección en 2006 y una segunda vez en 2012, el candidato oriundo de Tabasco parece encaminarse hacia una victoria contundente el 1 de julio. El Poll Tracker de Bloomberg lo ubica 26 puntos porcentuales arriba frente a su rival más cercano.
El peso mexicano cayó a su nivel más débil en más de un año este martes, en medio de preocupaciones de que un pacto comercial con Estados Unidos no sea aprobado antes de 2019.
Mientras que López Obrador ha hablado duro contra Trump y criticado al TLCAN en el pasado, ha sido favorable al libre comercio y el acuerdo trilateral durante su campaña.
"Por supuesto" López Obrador preferiría no tener TLCAN que un mal acuerdo, dijo Esquivel cuando se le preguntó si el candidato compartía la opinión de Canadá sobre el asunto.
"Realmente no estamos buscando un acuerdo bilateral con Estados Unidos o Canadá. El acuerdo trilateral es lo que queremos".
El vencedor de las elecciones del próximo mes no tomará posesión hasta el 1 de diciembre. Durante ese prolongado periodo, López Obrador quisiera que miembros de su equipo participaran en las conversaciones del TLCAN, que seguirán dirigidas por la administración del presidente Enrique Peña Nieto.
La razón de esa participación es "sólo para asegurarnos de que todo lo que se está negociando y que eventualmente se aprobará bajo la administración de López Obrador sea algo en lo que él esté de acuerdo en todos los términos", dijo Esquivel.
Cuando se le pidió que aclarara los mensajes contradictorios de la campaña de López Obrador sobre la histórica reforma petrolera del país , Esquivel dijo que los contratos de perforación privados ya ganados en subastas serían respetados, a menos que se descubra corrupción durante un proceso de auditoría.
Dijo que el ritmo de las subastas futuras se ralentizaría, pero lo más probable es que continúe para los bloques de aguas profundas, ya que México no cuenta con los recursos o la tecnología para operar esos campos.
"Hasta ahora, con los contratos que hemos estado revisando, los acuerdos están bien para nosotros. Creo que el Estado obtuvo un trato justo en estas subastas, por lo que podrían continuar".
Esto contrasta con algunas declraciones de López Obrador durante la campaña, por ejemplo, de que podría reformar la industria petrolera del país en la segunda mitad de su eventual administración.
Pero Esquivel dijo que López Obrador no espera tener los dos tercios en el Congreso necesarios para cambiar las reformas constitucionales sobre petróleo, y también sobre educación.
En este último rubro, se propondrá un proyecto de ley en el primer año de Gobierno para mejorar las condiciones laborales de los docentes, detalló esquivel.
López Obrador ha asegurado que echará atrás la reforma educativa, que cuestiona porque asegura que fue más bien una reforma laboral que dañó a los profesores.
Respecto al nuevo aeropuerto, Esquivel reiteró que AMLO insistiría en detener temporalmente la construcción con el fin de revisar los contratos y decidir si se mantiene el proyecto actual.
Con respecto a un informe de Bloomberg News de que Guillermo Ortiz está siendo considerado para un puesto en el gabinete por pare de López Obrador, Esquivel dijo que no hay posibilidades de que el exsecretario de Hacienda y exgobernador del Banco de México sea nombrados para un alto cargo en el gabinete.
Sin embargo, dijo que sí se podría pedir que se una a la administración a Santiago Levy , vicepresidente del Banco Interamericano de Desarrollo y exsubsecretario de Hacienda cuando Ortiz era titular de la dependencia en el sexenio de Ernesto Zedillo, pero aún no se le ha ofrecido un puesto específico.
El equipo de transición de López Obrador sería muy similar a las 17 selecciones del gabinete que anunció en diciembre, dijo Esquivel, y Carlos Urzúa se convertiría en el secretario de Hacienda.
En la misma línea, el hombre que dirige al equipo asesor del candidato durante la campaña, Alfonso Romo, probablemente encabezará su equipo de transición si gana las elecciones.