Dentro de dos años, a todas las parejas chinas se les permitirá tener un segundo hijo, indicó un investigador que asesora al gobierno en políticas de control de natalidad.
"Vamos a relajar por completo la política" en dos años, tras haber realizado un ensayo que permite a algunas parejas tener un segundo hijo, aseguró Cai Fang, un subdirector de la Academia China de Ciencias Sociales, el ente gubernamental dedicado a la investigación, en una entrevista después de una conferencia en Beijing.
"Las personas desean elegir el número de hijos que quieren tener, y se les debe dar la opción, al menos para dos niños."
El presidente chino Xi Jinping ya había flexibilizado la política de planificación familiar el año pasado, permitiendo a las parejas tener dos hijos si uno de los padres es hijo único. El cambio no desencadenó un boom de natalidad en el país más poblado del mundo, pues menos del tres por ciento de los 11 millones de parejas chinas que pueden optar por un segundo hijo solicitó autorización en los primeros seis meses, según datos de la Comisión de Planificación Familiar y Salud Nacional.
Para fines de agosto, 690 mil parejas solicitaron en China la aprobación de un segundo hijo y el permiso se le otorgó a 620 mil, según un comunicado de la Comisión de Planificación Familiar de la nación.
Cai expuso que permitir segundos hijos no aumentará significativamente la tasa de fecundidad de manera que incremente una población que, según predicciones de las Naciones Unidas, empezará a disminuir para 2030. La tasa de fecundidad de China de 1.66 hijos por mujer se confronta con el nivel de 2.1 necesario para mantener los niveles de población, de acuerdo con la ONU.
DESCENSO DEMOGRÁFICO
La población en edad de trabajar de China –las personas entre 16 y 59 años de edad– se redujo en 2012 y 2013, disminuyendo con ella la fuerza laboral del país que contribuyó a atizar tres décadas de rápido crecimiento económico.
Cai sostiene que en la medida en que esa fuerza laboral desciende cada vez más, la tasa potencial de crecimiento de China caerá a un promedio de 6.2 por ciento anual entre los años 2016 y 2020.
Pero Fan Gang, exasesor del Banco Popular de China, es más optimista. En su intervención en un foro en la ciudad de Wuhan, pronosticó una tasa potencial de crecimiento de entre 7 y 8 por ciento por año hasta el 2020.