El 29 por ciento de los procedimientos que se adjudicaron mediante licitación pública para la construcción del Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM) no fueron asignados bajo criterios de competencia, concluyó el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO).
El IMCO realizó un análisis de 117 contratos entregados vía licitación pública hasta abril pasado y concluyó que 34 de ellos fueron adjudicados con una sola propuesta solvente, es decir, los procedimientos se asignaron sólo con una opción que cumplía con todos los requisitos legales, administrativos y técnicos que establecieron las convocatorias.
"Es decir, al final cuando el Grupo Aeroportuario tenía que decidir a quién dar el contrato tenía sola una opción solvente. Muchas veces lo que sucede es que los requisitos acaban por frenar la competencia", explicó Ana Thais Martínez, investigadora del IMCO.
El monto adjudicado a procesos con una sola propuesta solvente suma 1 mil 801 millones 502 mil 818 pesos, señala el análisis 'Nuevo Aeropuerto Internacional de México, un proyecto indispensable: riesgos y oportunidades'.
En particular, resalta un procedimiento por casi 1 mil 115 millones de pesos adjudicado mediante esta forma y que tuvo como finalidad desarrollar la ingeniería a detalle y construcción de subestaciones y acometida eléctrica de la terminal aérea.
"Para fines prácticos, tomar en cuenta una sola propuesta equivale a una adjudicación directa de facto, por lo que estos procedimientos deberán revisarse por los órganos auditores correspondientes", se lee en el estudio del organismo dirigido Juan Pardinas.
Si la dependencia compradora, en este caso el Grupo Aeroportuario de la Ciudad de México, adjudica un contrato al proveedor con la única propuesta viable o solvente, hay un riesgo de simulación de competencia.
A pesar del porcentaje de adjudicaciones que, según el IMCO, podrían no haber seguido el proceso idóneo de competencia, el 90 por ciento del monto total de las obras del aeropuerto se adjudicó a través de licitaciones públicas y sólo el resto mediante adjudicaciones directas.
Al medirse lo anterior por número de contratos, el 57 por ciento fueron entregados vía adjudicación directa, el 22 por ciento mediante invitación restringida y 21 por ciento por licitación pública.
Hasta ahora se han entregado 274 contratos para la construcción de la terminal.
"En cuanto a la competencia en las contrataciones del aeropuerto, se encontró que la mayoría de estas se han realizado por medio de adjudicaciones directas, es decir, el modo de contratación menos competido", se lee en el estudio.
'El aeropuerto debe continuar'
El IMCO defendió la construcción de la nueva terminal aérea y aseguró que una consulta pública para que éste se lleve a cabo, como lo ha propuesto el presidente electo Andrés Manuel López Obrador, daría una mala señal a los inversionistas y afectaría la imagen de México en el extranjero.
El IMCO argumenta que la actual terminal aérea de la Ciudad de México es obsoleta para la fuerza económica de la región, lo que se demuestra con el hecho de que México se sitúa en el último lugar en logística comercial entre los 36 países que conforman la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico.
"De cancelarlo a una concesión sería mejor una concesión, pero si se concesiona sí tendría que haber un esquema muy serio sobre las pérdidas que va a tener el Estado mexicano por el uso de una operación tan valiosa. Si lo concesionamos creo que vale un ahorro de corto plazo pero una pérdida de largo plazo", explicó Max Kaiser, director de Anticorrupción del organismo, al ser cuestionado sobre la viabilidad de que el total de la inversión para la terminal y su operación recaiga en terceros como lo ha planteado AMLO.
La capacidad del actual aeropuerto es de poco más de 32 millones de pasajeros, y en 2017 la terminal dio servicio a 44.5 millones de pasajeros.