Moody's calificó como créditos negativos la línea de 15 mil millones de pesos aprobada el jueves pasado por Banobras, Bancomext y Nafinsa para que Pemex pudiera pagar a sus proveedores.
La calificadora dijo que la razón es que esto incrementa la exposición conjunta de los bancos a la deuda de Pemex de 44 por ciento actual a 62 por ciento, lo que pone en riesgo su cartera.
"Los tres prestadores ya tienen altos riesgos de concentración con sus 20 acreedores más fuertes", señala Moody's.
El préstamo viene por mandato gubernamental en un contexto en el que el propio gobierno mandó que se incrementaran los préstamos al sector privado por parte de la banca de desarrollo luego de la reforma financiera de 2014, lo que pone aún más presión sobre estas entidades, señala el mismo reporte de la calificadora.
"Para cumplir con los compromisos del gobierno de 1 billón de pesos en nuevos préstamos entre el 2014 y el 2018, la banca tendrá que recurrir a nuevas deudas y créditos de bancos multilaterales respaldados por el gobierno", dijo Moody's en su reporte.
Pemex pidió el préstamo para pagar 15 mil millones de pesos a sus proveedores más pequeños, sobre todo pequeñas y medianas empresas a las que el año pasado les modificó sus contratos para incrementar el tiempo en que se paga una factura a 180 días.
A los grandes proveedores que son menos en número, pero más en cantidad adeudada, aún se les debe cerca de 100 mil millones de pesos, de acuerdo con cálculos de la propia tesorería de la petrolera.