Si Estados Unidos instaura una reforma fiscal con la que gravaría las importaciones y exentaría las exportaciones conocida como Border Adjustment Tax (BAT), México tendría que adoptar el mismo esquema fiscal, según analistas.
El BAT se trata de un esquema fiscal con el que se determinaría el ISR a las importaciones que iría de entre 15 y 20 por ciento, pero que no se aplicaría a las exportaciones, con lo que se persigue impulsar la producción local. Además, se espera que sea parte de una reforma más amplia con la que se reduzcan los impuestos corporativos.
"Si eso sucede provocaría un cambio fiscal en todos los demás países porque habría una especie de competencia hacia abajo (para reducir impuestos)", dijo Jorge Correa, socio del despacho Creel, García-Cuellar, Aiza y Enríquez.
Aunque aún hay incertidumbre ante esta propuesta de los legisladores republicanos debido a que no se han dado a conocer mayores detalles del BAT, Correa precisó que al ser una reforma fiscal, se espera se aplique de manera general a todos los productos, de todos los socios comerciales de EU y de ahí la necesidad de que la comunidad internacional adopte este esquema.
"El BAT es una propuesta que pretende sustituir al ISR americano, es 100 por ciento política fiscal, no estamos hablando de tratados de libre comercio (...) si EU hace ese cambio, sería uno muy radical y es un cambio que ningún país ha hecho", dijo Correa.
En tanto que Miguel Buitrón, experto en derecho fiscal del despacho Buitrón y Asociados, considera que México ya debería trabajar en una reforma fiscal que se adapte a la propuesta del BAT pues asegura que es un hecho que la propuesta estadounidense será aprobada.
"El hecho es que no veo yo una acción de parte de nuestras autoridades ya que la reacción tendría que ser ya, ahorita, esperan el batazo para efectos de reaccionar", dijo Buitrón, quien incluso considera que Hacienda ya debería tomar un rol protagónico en la relación con EU y que es fundamental subir al legislativo a este proceso.
Ayer el presidente Donald Trump expresó su aprobación a una propuesto de impuesto de ajuste fronterizo, pero no la respaldó específicamente.
"Podría llevar a muchos más trabajos en Estados Unidos", aseguró el mandatario en una entrevista con Reuters.
UNA BOMBA DE TIEMPO
Sin embargo, reaccionar de la misma forma no es algo que respalden todos los expertos. Carlos Serrano, economista en jefe de BBVA Bancomer, consideró que eso sólo afectaría a los consumidores de ambos lados por lo que ir con la ley del talión perjudica a las dos naciones.
"México debe ser enérgico con EU y sin duda alguna no permitir cuestiones que sean de abuso, mostrarse fuerte, pero de manera inteligente y no en cuestión que si bien pueden dañar a EU, nos pueden también dañar a nosotros", dijo Serrano.
En la misma línea, Manuel Valencia, académico del Tec de Monterrey,, considera un error reaccionar de la misma forma. "(Aplicar una política espejo a EU podría ser una bomba de tiempo) sin duda porque entraríamos en el juego de ellos y ellos son más poderosos e influyentes globalmente", dijo Valencia.
En su lugar, los expertos consideraron que se debe recurrir a tribunales internacionales y 'pegarle' al vecino país donde más le duele para evitar la implementación del BAT, como comprando granos de otros países.
Además, otras cartas bajo la manga pueden ser temas bilaterales que no se relacionan al comercio, según Serrano.
"Hay muchos temas en materia de seguridad que también se pueden hacer ver a EU que México es un socio que coopera mucho, nunca ha habido un terrorista que entre a EU por México", dijo Serrano.
Sin embargo, para Buitrón, si bien México podría acudir a los tribunales de la OMC al considerar que con el BAT se viola el TLCAN, la respuesta podría tardar años, por lo que la mejor opción es actuar ya.