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La Asociación Canadiense de Productores de Acero (CSPA) y la Cámara Nacional de la Industria del Hierro y el Acero (Canacero) solicitaron que, si llega la consolidación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), se eliminen los aranceles al acero y al aluminio mexicano y canadiense impuestos por Estados Unidos bajo la sección 232 de la Ley de Expansión Comercial.
"Esperamos trabajar con nuestros respectivos gobiernos a medida que avance un acuerdo trilateral renegociado para asegurar que las restricciones comerciales dentro de la región sean eliminadas de manera responsable, mientras que el comercio desleal fuera de la región del TLCAN sea abordado de manera efectiva", apuntaron ambos organismos en un comunicado conjunto.
De acuerdo con Joseph Galimberti, presidente de CSPA, un TLCAN renegociado es la ventana de oportunidad idónea para remover los gravámenes que se han impuesto a algunos de los productos del sector en donde se encuentran.
"La renegociación del TLCAN representa una oportunidad ideal para eliminar las barreras comerciales en el acero y el aluminio dentro de la región para fortalecer a las principales cadenas de suministro en energía, industrial, construcción y manufactura de América del Norte", dijo Galimberti.
Para Máximo Vedoya, presidente de la Canacero, la esencia de un acuerdo libre comercial se rompería si se mantuvieran dichas medidas impuestas por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
"Un TLCAN con aranceles al acero y aluminio contradice sustancialmente el propósito principal de un TLC", apuntó Vedoya en el comunicado.
Actualmente, el 76 por ciento de las exportaciones de acero mexicano se envía a la región de América del Norte; el 97 por ciento de las exportaciones de acero de Canadá se dirigen a sus socios del TLCAN; y el 90 por ciento de las exportaciones de acero estadounidense se van hacia sus vecinos del norte y del sur.