La deuda pública externa del país ya es mayor a las reservas internacionales. Al cierre de enero sumó 180 mil 646 millones de dólares, mientras que el saldo en las reservas totalizó 174 mil 791 millones de dólares.
Estos indicadores representan un riesgo en los análisis financieros para la calificación soberana de México, la cual ya tiene perspectiva negativa en las últimas revisiones de Moody's, Fitch y Standard & Poor's.
"Tenemos más deuda de lo que tenemos disponible en reservas, si esto sigue avanzando iremos perdiendo esa imagen de solidez que teníamos. Antes la teníamos porque podíamos prepagar el 100 por ciento de la deuda, y todavía teníamos 50 o 60 mil millones de dólares en las reservas de más. Ya no tenemos ese colchón", comentó Ernesto O'Farril, presidente de Grupo Bursamétrica.
Estos indicadores inciden en los análisis de calificación soberana. Si el capital contable, el patrimonio no alcanza para pagar las deudas de corto, ni de largo plazo, habla de una situación financiera de un deudor en riesgo, entonces indicaría a las instituciones financieras no prestar más, comentó por su parte Raymundo Tenorio, director de la carrera de Economía de la Escuela de Negocios del Tec de Monterrey.
"Es un indicador de alerta, no significa que las reservas vayan a ser para pagar deuda, pero estamos rebasando ciertos umbrales que pueden ser peligrosos. Estaríamos regresando a la época en la que se decía que ya no era deuda externa, sino eterna. Los bancos internacionales siguen ganando, vamos a estar trabajando para pagar intereses y no vamos a liquidar esa deuda", dijo David Colmenares, expresidente del Colegio Nacional de Economistas.
MÁS COSTO POR OBLIGACIONES
La situación también implica un mayor gasto al pago de la deuda. En enero el costo financiero subió 54 por ciento anual, al sumar 54 mil 79 millones de pesos.
"Lo realmente peligroso de esto son los recursos que estamos canalizando por el servicio de deuda, fundamentalmente por intereses, que se carcomen parte del presupuesto", consideró Colmenares.