Un grupo de bonistas que afirma tener más del 50 por ciento, al menos de una serie de los bonos del Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM), reconoció estar preocupado y no respaldar la oferta de recompra por mil 800 millones de dólares por parte del Gobierno.
El grupo de inversionistas, que estaría representado y en contacto con Hogan Lovells, también señaló a través de un comunicado de Business Wire, que no fue consultado sobre esta propuesta, pero que se encuentra dispuesto a dialogar para abordar sus inquietudes.
Entre las preocupaciones del grupo se encuentran la liberación y eliminación de garantías y eventos de incumplimiento relacionados con el proyecto de Texcoco. Además, también preocupa la concesión del consentimiento de los tenedores a las liberaciones, el pacto y cambios a pesar de que los bonos no se pueden comprar en su totalidad.
En relación con el aeropuerto actual, a los tenedores les preocupa la posible reducción de la garantía (TUA) derivado del uso o construcción, a corto o largo plazo, de aeropuertos alternativos o adicionales en el área de la Ciudad de México.
Además, genera incertidumbre el pago restringido en dos de las cuatro series de bonos, si se considera que los tenedores de bonos que participen en la oferta pública consienten en la liberación de la garantía y en las modificaciones a los convenios y supuestos de incumplimiento.
El Fideicomiso del Nuevo Aeropuerto Internacional de Ciudad de México (NAICM) ofreció el lunes recomprar hasta mil 800 millones de dólares en bonos emitidos para financiar la construcción de la terminal aérea, cuya cancelación fue anunciada por el mandatario hace semanas y golpeó duramente a los mercados.
Los bonos son parte de un total de 6 mil millones de dólares en papeles internacionales emitidos por Grupo Aeroportuario de la Ciudad de México -empresa mayoritariamente estatal y encargada del proyecto-, para costear la construcción de la terminal aérea valorada en más de 13 mil millones de dólares.
Más tarde, el subsecretario de Hacienda, Arturo Herrera, dijo que hay probabilidades de hacer una "decisión temprana" sobre la recompra de bonos antes de presentar el presupuesto el 15 de diciembre, aunque la oferta se abrió para los próximos 20 días hábiles.
"Hay una probabilidad que yo diría no es menor, una probabilidad importante, de que justo un día antes que presentemos el paquete podamos tener para todos los efectos prácticos cerrado el tema del bono y de relación con los bonistas", dijo a Radio Fórmula.
Analistas han comentado que la oferta de recompra, que funciona como un tipo de subasta, es una forma de "control de daños" tras el anuncio de cancelación del proyecto que ya tiene un avance cercano al 30 por ciento. La medida evitaría demandas de inversores extranjeros en bonos afectados.
Fitch Ratings dijo en un comunicado que si la oferta propuesta y la oferta de consentimiento anunciada por el fideicomiso tienen éxito, "aliviaría algunos riesgos a corto plazo".