La nueva política energética del presidente de Estados Unidos, Donald Trump aunado a menores costos de producción y venta del shale gas y oil, darían un nuevo impulso a esta industria lo que para México implicaría relanzar la ronda petrolera de campos de este tipo en Coahuila, Nuevo León y Tamaulipas.
La nueva política energética estadounidense, esbozada en el portal de la Casa Blanca señala que "abrazarán" los productos de piedras shale como gas y petróleo en suelo de ese país.
"La administración de Trump apoyará el desarrollo de shale oil y la revolución de gas para incrementar la prosperidad de los americanos.
"Debemos tomar ventaja de lo que estimamos son 50 billones de dólares en shale gas y shale oil que no hemos destapado, especialmente en las tierras federales de las que los americanos son dueños", dice el nuevo plan.
Esto podría ser posible luego que los costos de extracción se han abaratado, cuando hace dos años era necesario un precio del barril mínimo de entre 60 y 70 dólares para que fuera viable extraer este tipo de recursos, ahora, después de avances tecnológicos en las técnicas de extracción, un precio de entre 40 y 45 —inferior al actual que ronda los 50 dólares— es suficiente, de acuerdo con cálculos de la Universidad de Texas.
Para México, estos nuevos cambios podrían implicar desarrollar de nuevo las áreas de estados en el norte del país, que tienen unas de las reservas más amplias de shale en el mundo, como para ubicarse en el sexto lugar a nivel global.
Con estos cambios en tecnología y desarrollo es más probable que la Sener reconsidere la inclusión de este tipo de campos, pues para Jorge Piñón de la Jackson School of Geosciencies de la Universidad de Texas en Austin, el primer lugar al que se podría transferir la nueva tecnología es a los nuevos yacimientos de México que tienen la misma geología que los de Texas.
Explicó que la nueva tecnología se puede transferir al país, "podría empezar a revivir también en México el tema (del shale)", dijo.
La Secretaría de Energía (Sener) planeó originalmente que la Ronda 1, tuviera una licitación que fuera de recursos no renovables, en las que se pensó incluir áreas con posibilidad de extracción de shale en la zona de Burgos que luego fue cancelada por la caída en los precios de 2014-2015.
Ahora este programa se convirtió en parte de la Ronda 2 pero no tiene fecha, ni áreas consideradas.