El desempeño positivo del mercado laboral en México durante los últimos meses es consecuencia de la combinación entre la generación de nuevas plazas en el sector formal de la economía y el registro de personas que ya trabajaban, pero que no estaban incorporadas en la seguridad social, mencionó Tuffic Miguel Ortega, director del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
"En enero se generaron casi 114 mil empleos, esto es un 36 por ciento más que en enero del año pasado y es el tercer mejor enero desde que tenemos registro", explicó Miguel Ortega en entrevista televisiva con El Financiero Bloomberg.
"Nuestra tasa anual de crecimiento es del 4.5 por ciento y, sin duda, es una combinación de generación de empleos, con algunos datos de formalización de empleos que antes no estaban asegurados y los estamos incorporando, pero para el seguro social son nuevas afiliaciones. (…) La meta es cerrar esta administración con los cuatro millones de empleos", mencionó el funcionario.
A inicios de la semana, el Secretario de Hacienda, José Antonio González Anaya, señaló que la tendencia positiva del empleo también se debe a una tendencia positiva en la economía.
"Estamos casi en 3 millones 200 mil empleos. Esto es, casi el doble de lo que se generó en el mismo periodo de la administración anterior, y es un número sin precedentes gracias al desarrollo positivo de la economía", apuntó.
Ayer, el INEGI dio a conocer que durante el cuarto trimestre de 2017, se registró una tasa de desocupación de 3.4 por ciento respecto a la Población Económicamente Activa (PEA), esta cifra representa el nivel más bajo para un cierre de año desde 2005, según los registros de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE).
La tasa de desocupación, que es aquella que se refiere a las personas que no trabajaron ni una hora durante el periodo en el que se realizó la encuesta, pero que mostraron disposición para trabajar o hicieron alguna actividad para obtener empleo, registró una disminución de 0.2 por ciento con base a cifras desestacionalizadas durante el periodo de octubre a diciembre.
La cantidad de personas desocupadas en el país durante el último trimestre del año anterior fue de un millón 830 mil 793 personas, 80 mil 333 menos a las registradas un año antes.
42% de los trabajadores
En México ganan como máximo 2 salarios mínimos.
Percepciones con minisalarios
En la generación de trabajos generados durante el año anterior predominó el de bajos salarios, mientras que las plazas con mayor remuneración disminuyeron.
De acuerdo con los resultados de la ENOE, el número de trabajadores en el país cerró el 2017 con 52 millones 866 mil, unos 742 mil más que el año previo.
Los empleos generados se concentraron en los de menor ingreso. Con remuneraciones de hasta un salario mínimo, dos mil 400 pesos al mes, el número de ocupados se ubicó en 7 millones 926 mil, 479 mil más que en el cuarto trimestre de 2016. En el rango de más de uno hasta dos salarios mínimos, cuatro mil 800 pesos como máximo, laboraron 14 millones 216 mil personas, casi 640 mil más.
En deterioro
El nivel de ocupación en el país se mantiene al alza, al igual que el empleo formal.
Sin embargo, son cada vez más los trabajadores con bajos salarios y en condiciones precarias.
Con niveles superiores a los dos salarios se observó una reducción de puestos de trabajo. En el rango de dos a tres salarios mínimos la disminución fue de 707 mil; entre los tres y cinco salarios la contracción fue de 186 mil y en el caso de los mejor pagados, con salarios a partir de los cinco salarios mínimos, desde 12 mil pesos, el descenso fue de 734 mil.
Los registros indican que casi uno de dos trabajadores en México, 42 por ciento del total, perciben como máximo dos salarios mínimos al mes y ésta es su mayor proporción para un cierre de año desde que hay registros disponibles, a partir de 2005.
Además, el INEGI informó que al cierre de 2017, se registraron 30.2 millones de personas con una ocupación informal. Dicha cifra reflejó un aumento 1.1 por ciento, unas 322 mil personas más, en relación al mismo periodo de 2016. Sin embargo, la tasa de informalidad laboral, que es el número de personas bajo esta condición respecto a la PEA, cayó 0.2 puntos porcentuales, a 56.8 por ciento.