Los coches de la Ciudad de México podrán tener gasolinas más limpias, lo que ayudará a la contaminación y los propios motores de todos los vehículos de la metrópoli.
Esto porque el Consejo de Administración de Petróleos Mexicanos aprobó el plan para la reconfiguración del tren de gasolina de la refinería de Tula, con lo que esta fábrica que abastece a todo el Valle de México producirá gasolinas de bajo azufre en los próximos tres años, anunció el secretario de Energía, Pedro Joaquín Coldwell.
"La semana pasada el Consejo de Pemex aprobó el programa de reconfiguración de la refinería de Tula para producir gasolinas de ultrabajo azufre, entonces estimamos que será una cuestión de 2 a 3 años que podamos estar ya produciendo ese tipo de combustibles", señaló el secretario.
Cabe recordar que una de las unidades más afectadas por el recorte realizado este año a la entidad, de 62 mil millones de pesos, fue Pemex Refinación y dentro de los proyectos de inversión de esta entidad (ahora parte de Pemex Transformación Industrial) los proyectos de ultrabajo azufre fueron los retrasados.
De hecho durante un foro organizado por la revista británica The Economist, el secretario también anunció que Pemex está en búsqueda de socios financieros para estos proyectos.
"Pemex está en este momento negociando con fondos financieros la posibilidad de financiamiento de las otras refinerías y puedan operar ya este tipo de combustibles muy bajo en azufre", declaró Joaquín Coldwell.
Hoy la gasolina que producen las refinerías de Pemex tiene tanto azufre que ni siquiera cumplen con las Normas Oficiales Mexicanas (NOMs) en la materia, ni los propios estándares internacionales.