La falta de financiamiento a través del crédito, el exceso de trámites gubernamentales e impuestos altos, la competencia desleal de empresas informales, la falta de capacitación, son factores que inciden en el crecimiento de las Micro, Pequeñas y Medianas Empresas (MiPymes), pero también en su mortalidad, ya que 42 por ciento de las empresas bajan la cortina antes de cumplir cinco años de vida.
La Encuesta Nacional sobre Productividad y Competitividad (ENAPROCE) 2015, señala que durante 2014 en el país existieron poco más de cuatro millones de Micro, Pequeñas y Medianas Empresas, clasificadas en los sectores de manufacturas, comercio y servicios; resalta que del total de empresas, 97.6 por ciento son microempresas y concentran el 75.4 por ciento del personal ocupado.
La ENAPROCE 2015, que fue presentada este mediodía por el Inegi en conjunto con el INADEM y Bancomext, revela que el 68 por ciento del total de las empresas reportadas por la encuesta no aceptarían un crédito bancario porque lo consideran caro.
La encuesta señala que alrededor del 23 por ciento de las MiPymes a las que se les rechazó un crédito señalan que la ausencia de garantía o aval fue lo que impidió acceder a financiamiento en el periodo 2013-2014.
En relación a las empresas que sí tuvieron acceso al financiamiento, destaca que casi 40 por ciento de las medianas empresas pudieron contar con un crédito, seguidas por las empresas pequeñas con un 28 por ciento y las microempresas con un 10 por ciento.
En cuanto a las capacidades gerenciales de las MiPymes, la ENAPROCE 2015 muestra que el 38 por ciento de las empresas utilizaban un cuaderno o libreta de apuntes en el año de inicio de sus operaciones, porcentaje que disminuyó a 25 por ciento en 2015.
A la par de ello, aumentó el porcentaje de empresas que tienen el servicio de un contador, al pasar de 34 por ciento en la apertura de su negocio a 48 por ciento en 2015.
En el tema de capacitación, la ENAPROCE 2015 arroja que sólo el 12 por ciento de las MiPymes imparte capacitación a su personal, por tamaño resalta que sólo 11 por ciento de las microempresas capacitan a su personal, mientras que las empresas pequeñas y medianas registran tasas más altas con 55 y 73 por ciento, respectivamente.
Julio Santaella, presidente del Inegi, dijo que todo ese cúmulo de factores causa la mortalidad temprana de las MiPymes, esto al considerar que la esperanza de vida de un negocio al nacer es de ocho años.
En ese sentido, Arturo Blancas, director general de Estadísticas Económicas del Inegi, aseguró que alrededor del 42 por ciento de las empresas se mueren antes de los 5 años de vida, pero si logran supervivir más allás de un lustro, entonces las empresas pueden vivir 10 años más.
En la presentación de la ENAPROCE 2015 estuvieron presentes Enrique Jacob, presidente del Instituto Nacional del Emprendedor (INADEM), y Alejandro Días de León, director general del Banco Nacional de Comercio Exterior (Bancomext), quienes coincidieron en que esta Encuesta ayudará al diseño de políticas enfocadas a dar mayor financiamiento a las MiPymes.