Alrededor del 60 por ciento de la energía eólica de México ha estado fuera de servicio desde que el país fue golpeado por un terremoto masivo a principios de este mes. Ahora los esfuerzos para reactivar los parques eólicos se verán obstaculizados por el fuerte sismo que golpeó nuevamente al país este martes.
Aunque las mil 200 turbinas de la región sur de Oaxaca no sufrieron en su mayor parte daños como consecuencia del terremoto del 7 de septiembre, los centros de control, líneas de transmisión y subestaciones resultaron averiadas, según Leopoldo Rodríguez, presidente de la Asociación Mexicana de Energía Eólica.
Decenas de edificios en la Ciudad de México se redujeron a escombros por el temblor de 7.1 grados, y las cuadrillas de rescate siguen buscando sobrevivientes y víctimas. Con el país tratando de recuperarse de dos terremotos en el mismo mes, las entregas de piezas de repuesto necesarias para parques eólicos en el sur probablemente se desacelerarán, dijo.
"Todos los parques eólicos en Oaxaca tuvieron que parar", dijo Rodríguez en una entrevista telefónica este miércoles "Todavía no es posible saber cuándo podremos reanudar la producción. Algunos repuestos de infraestructura son más difíciles de conseguir ahora". Las plantas no fueron dañadas adicionalmente por el terremoto del martes.
México es uno de los países más sísmicamente activo, asentado en la intersección de cuatro placas principales de la corteza, según la agencia geológica de Estados Unidos. El primer terremoto de este mes tuvo una magnitud de 8.2 grados, mayor que el sismo de ocho de 1985.
Oaxaca lidera la energía eólica del país con casi 60 por ciento de los cuatro mil 500 megavatios (mw) en operación y en el primer semestre del año aportó 1.3 por ciento de la electricidad.
Brasil destaca en el uso de energía eólica en América Latina con 10 mil 800 mw en 2016.
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