Pese al recorte de las expectativas de crecimiento económico para la región realizado por el Banco Mundial, el Grupo Financiero Interacciones elevó su previsión para México, de 2.1 por ciento a 2.5 por ciento.
Carlos Fritsch, economista en jefe de Interacciones Casa de Bolsa, explicó que tras haber recortado su pronóstico de crecimiento a 2.1 por ciento en abril pasado, "regresamos al 2.5 por ciento publicado en enero de 2016. El pronóstico del consenso se encuentra en 2.4 por ciento".
En su reporte estimó que el PIB potencial de México aumentará a mediano plazo.
"Reafirmamos nuestra convicción de que, resultado de las reformas estructurales mexicanas, la productividad de la economía mejorará; ello será más visible en 2018-2020".
"Nos sorprendió el dinamismo del consumo privado. Aunque anticipamos correctamente la debilidad del sector industrial de Estados Unidos, minimizamos la persistencia del rebote en el consumo interno", expuso.
El principal motor de crecimiento en 2015 fue el consumo interno, esto se debió principalmente a que la base de comparación se mantuvo pequeña.
El indicador mensual del consumo privado en el mercado nacional registró un crecimiento anual promedio de 2.0 por ciento en 2014, mientras que en 2015 fue de 3.5 por ciento.
"Nuestro error en abril fue suponer que, con una base de comparación más alta, el ritmo de avance del consumo se contraería. Ello no sucedió, la dinámica del consumo en México es más fuerte de la que anticipábamos y es probable que logre sobrecompensar la debilidad del sector externo y la baja dinámica tanto del gasto del gobierno como de la inversión fija bruta, por esta razón, nuestro pronóstico (previo) de crecimiento de la economía mexicana de 2.1 por ciento para 2016, predicado en la debilidad del sector industrial de Estados Unidos, luce conservador", expuso Fritsch.
ENTORNO FISCAL
Por otra parte, el economista en jefe del Grupo Financiero Interacciones dijo que el recorte fiscal por 311.8 mil millones de pesos, equivalente a 1.7 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), recaerá en buena medida en la inversión del sector público, incluida la de Pemex y CFE.
La inversión pública en el país, se encuentra en niveles históricamente bajos.
"Aunque el efecto multiplicador del gasto público en México es poco importante, es evidente que su recorte limitará el crecimiento tanto en 2016 como en 2017", anotó.
El especialista agregó que las cifras de las exportaciones de manufacturas mexicanas continúan siendo débiles.
"Incluso es altamente probable que en 2016 haya un déficit de cuenta corriente de 3.1 por ciento, el más alto en muchos años", dijo.
En tanto, el Grupo Financiero Santander tiene confianza en el desempeño de la economía mexicana este año, por lo que mantuvo sin cambios su pronóstico de crecimiento en 2.6 por ciento para 2016.
Héctor Grisi, presidente Ejecutivo de Santander, indicó que han mantenido sin cambio su expectativa de crecimiento y que ha sorprendido en estos meses el dinamismo del consumo interno, el cual se prevé se mantenga el resto del año.