El presidente electo del Consejo Nacional Agropecuario (CNA), Bosco de la Vega Valladolid, sabe que con la presidencia del organismo agropecuario más poderoso del país vienen retos difíciles.
Haber ganado ayer con 82 por ciento de los votos, lo mismo da respaldo que compromete expectativas, en un contexto de incertidumbre marcado por el bajo crecimiento económico mundial, la debilidad del peso frente al dólar, el creciente intercambio comercial con menos barreras y la posibilidad de que Donald Trump se convierta en presidente de Estados Unidos.
"Van a ser años de retos difíciles. Estoy previendo también que para 2017 vaya a ser un gran reto la reforma fiscal, la presión sobre el IVA en alimentos la veo también fuerte", dijo De la Vega durante una reunión con la prensa tras ganar las elecciones.
La dificultad de la que habla podría materializarse en incrementos de precios de los productos alimenticios debido al tipo de cambio y el hecho que buena parte de los insumos del sector están tasados en dólares, lo que ha obligado a los proveedores a aguantar una reducción en sus márgenes de utilidad pues han optado por no modificar sus precios, algo que podría cambiar.
La presión es cada vez mayor por factores como que Estados Unidos mueva un cuarto de punto su tasa de interés, la "poco probable" posibilidad de que Trump gane y también la salida del Reino Unido de Europa.
"La verdad México está en serios problemas", dijo el presidente electo del CNA.
Si bien el campo mexicano pasa por un momento histórico con una balanza comercial superavitaria en 2015, para hacer frente a este panorama donde parece predominar la incertidumbre, lo que sigue es darle fuerza al CNA.
"(Sigue) conformar nuestro reforzamiento del staff del CNA y conformar las vicepresidencias y las comisiones de trabajo. Creo que es la primera campaña en el CNA que no ha obtenido votos a cambio de otorgar vicepresidencias", dijo el sinaloense.
Para De la Vega el objetivo primordial es reposicionar al sector, pues considera que políticamente se le tiene en un nivel inferior respecto a otras secretarías de Estado como la de Economía, y en la esfera privada en un escalón más bajo que sectores como el automotriz.
Si bien sus detractores lo acusan de proteccionista, pues fue uno de los principales coordinadores de la campaña que lucha por impedir las importaciones de papa fresca de EU, De la Vega considera que el TPP es positivo para México, al tiempo que deja ver indicios de que quiere un TLCAN más profundo que implique el flujo de personas.