El turismo en México enfrenta el reto de diversificarse para captar viajeros extranjeros que dejen más dinero, incluidos los que llegan por motivos de salud, dijo a El Financiero Enrique de la Madrid, titular de la Secretaría de Turismo.
El encarecimiento del dólar frente al peso en los últimos dos años y el precio hasta 89 por ciento menor en que se ofrecen los tratamientos en México respecto a Estados Unidos, aceleró el crecimiento del turismo médico y de bienestar en el país.
En 2016 este sector dejó en México una derrama de 4 mil 798 millones de dólares, un alza de 5.2 por ciento respecto a 2015 y la mayor tasa de crecimiento en 3 años, según datos de Euromonitor.
Además, la expectativa es que este año tenga un incremento de casi 6 por ciento y supere los 6 mil millones de dólares.
"Nunca habíamos tenido un turismo médico como el actual, es una industria exponencial que se basa en dos cosas: lo atractivo que es México como un destino de placer y que hay un buen sistema de salud privado, además de que el tipo de cambio ha hecho que la llegada de extranjeros se incremente", explicó Carlos Arce, presidente del Consejo Empresarial de Turismo Médico.
Según la plataforma de viajes Patients Beyond Borders, con sede en Carolina del Norte (Estados Unidos), México recibe cada año entre 200 mil y un millón 100 mil viajeros con motivos de salud, incluidos hispanos indocumentados que vuelven a su país para atención médica.
Aunque en México los tratamientos médicos están tasados en dólares, sus precios son más accesibles que en otras naciones e incluso se han mantenido estables en los últimos años.
En el país los procedimientos tienen un descuento promedio de 81 por ciento con relación a los costos en Estados Unidos, según la Asociación Internacional de Turismo Médico vertidos en un reporte de ProMéxico.
Mientras una cirugía de columna vertebral tiene un costo promedio de 100 mil dólares en la Unión Americana, en México se sitúa en los 12 mil dólares. En tanto, un implante de busto que en Estados Unidos se cotiza en los 10 mil dólares, en México ronda los 3 mil 500 dólares.
Roberto Montalvo, profesor de la licenciatura en Administración de la Hospitalidad por la Universidad Iberoamericana, estima que al año llegan a México 400 mil turistas por motivos de salud y que las intervenciones quirúrgicas son entre 30 y 40 por ciento más económicas aquí que en la Unión American.
"80 por ciento de los viajeros que recibe México son estadounidenses y son atraídos por el abaratamiento del peso frente al dólar. Vienen y lo que ahorran en las intervenciones lo gastan en visitar varios sitios en el país. Estos viajeros gastan muy por encima del promedio de los turistas internación (de 900 dólares), este segmento se está desarrollando, no tiene ni 5 años", añadió.
En los últimos 3 años se expandió la infraestructura para atender la creciente demanda de turistas de salud. Desde 2014 las clínicas, hospitales y centros de salud certificados por el Consejo de Salubridad General del gobierno creció 110 por ciento al alcanzar los 225 establecimientos.
"Hay un gran mercado interno que se complementa con el extranjero, además el sector hotelero tiene mucho que dar en este sentido", señaló Luciano Julio, director de Hyatt & House México, empresa que el próximo mes inaugurará un hotel en Santa Fe, en la CDMX, con conexión al hospital ABC. Así, la cadena se sumará a los establecimientos que tiene Camino Real con los Hospitales Ángeles.
Las unidades certificadas y enfocadas al turismo médico se ubican principalmente en tres regiones del país: una fronteriza y norteña en metrópolis como Tijuana, Nuevo Laredo, Monterrey, Ciudad Juárez y Reynosa; la del centro y occidente del país, que incluye la Ciudad de México, Guadalajara, San Luis Potosí, Querétaro; y finalmente, la correspondiente a la península de Yucatán, con Mérida y Benito Juárez.
De acuerdo con los expertos, el turismo médico enfrenta retos y amenazas. La falta de políticas públicas para su consolidación, la incertidumbre sobre el efecto que pueden tener las iniciativas migratorias de Trump, así como la creciente inseguridad en la frontera con la Unión Americana, ponen en riesgo el crecimiento de este negocio.
"Hay una mayor inseguridad en las zonas fronterizas, muchas personas que quieren cruzar vía terrestre ya no lo hace por esa razón", explicó Javier Amieva, experto en temas de la frontera México-Estados Unidos.
Además, ejecutivos de las aerolíneas nacionales han señalado que muchas personas de origen hispano ya no viajan de Estados Unidos a México por temor a encontrar dificultades de migración y no poner regresar.