Fiat Chrysler pagará una cifra estimada de 800 millones de dólares en multas y costos relacionados con el retiro y reparación de miles de vehículos bajo acuerdos civiles anunciados este jueves por California y el Departamento de Justicia de Estados Unidos, que alegó que algunos de sus vehículos a diésel transgredieron las reglas de emisiones contaminantes.
"Un mal actor corporativo multinacional infringió gravemente las leyes de emisiones de Estados Unidos en detrimento de la salud y el bienestar del pueblo local", señaló Jeffrey Bossert Clark, asistente del fiscal general de la División de Medio Ambiente y Recursos Naturales del Departamento de Justicia. "Eso es un delito muy grave".
Los costos totales para zanjar las demandas podrían superar los 800 millones de dólares, según los acuerdos alcanzados con el Gobierno de EU, California y los consumidores. El total de 307.5 millones de dólares del acuerdo con los consumidores -en el que Fiat Chrysler deberá aportar hasta 280 millones de dólares- se basa en el 100 por ciento de participación de los consumidores, por lo que es probable que la cifra sea menor.
Cada propietario de los vehículos afectados recibirá un promedio de 2 mil 800 dólares a modo de compensación, informó Fiat Chrysler.
Fiat Chrysler no tendrá que admitir irregularidades, consignan los documentos. Pagará a los propietarios de aproximadamente 104 mil SUV y camionetas diésel para que actualicen el software de emisiones en los vehículos a través de un retiro, según un decreto de consentimiento del consumidor presentado este jueves en una corte federal de California.
"Los acuerdos no cambian la posición de la compañía de que no se involucró en ningún plan deliberado para instalar dispositivos de desactivación para burlar las pruebas de emisiones", dijo el fabricante de automóviles en un comunicado. "El decreto de consentimiento y los acuerdos de conciliación no contienen hallazgos ni admisión con respecto a las presuntas transgresiones a las leyes de emisiones de los vehículos".
El pacto resolverá las demandas civiles del Departamento de Justicia en representación de la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos de que algunos modelos Jeep Grand Cherokee y Ram 1500 contienen software de control de la contaminación que limita incorrectamente la contaminación durante las pruebas de laboratorio y permite que los vehículos arrojen el exceso de emisiones en la carretera.
Fiat Chrysler también aceptó reformas de gobierno corporativo orientadas a prevenir futuras violaciones de emisiones en virtud del acuerdo. A fin de mitigar el exceso de emisiones de los vehículos, Fiat Chrysler también proporcionará fondos y trabajará con un fabricante de convertidores catalíticos para ofrecer a los conductores mejores reducciones de emisiones cuando reemplacen esa pieza.
Fiat Chrysler estará sujeto a multas adicionales si no actualiza el software en al menos el 85 por ciento de los vehículos afectados dentro de dos años, dijo la agencia en un comunicado.
"Los estándares de emisión de California existen para proteger a nuestros residentes y al medio ambiente de la contaminación dañina", dijo el fiscal general de California, Xavier Becerra. Fiat Chrysler intentó evadir estos estándares instalando software para hacer pruebas de emisiones. "La compañía no solo violó la ley y nuestra confianza, sino que lo hizo a expensas de nuestro medio ambiente".