Un repunte de casi 25 por ciento en los precios del crudo Brent y la mayor producción del negocio de exploración compensó el menor margen de refino de la petrolera Repsol en el primer trimestre del año, inclinando la balanza hacia un crecimiento del beneficio ajustado del 8 por ciento.
El grupo dijo este viernes que su beneficio neto antes de extraordinarios y a costo constante de inventario (CSS) se situó en 616 millones de euros, ayudado también por un descenso de los costos financieros y en línea con la proyección media de un sondeo de Reuters de 615 millones de euros.
En el mercado, las acciones de Repsol seguían la tendencia plana de las operaciones, con los analistas aplaudiendo en líneas generales los sólidos resultados de la división "upstream", que aportó más de la mitad del resultado.
La deuda neta subió en 569 millones de euros con respecto al cuarto trimestre y cerró marzo en 6.836 millones, debido fundamentalmente a la compra de acciones propias para atender un dividendo en títulos a fin de no diluir al resto de accionistas.
En el informe de resultados, Repsol señaló que aplicó un deterioro en su balance por riesgos de crédito de 433 millones euros, principalmente relacionado con Venezuela, país que encara elecciones presidenciales y cuya economía está estrangulada por la hiperinflación.
El año pasado, el grupo decidió ajustar el valor de sus activos en el país en 640 millones de euros para reducir su exposición hasta unos un mil millones 300 mil de dólares.