El presidente y fundador del Grupo Omnilife, Jorge Vergara, destacó que las habilidades necesarias para emprender se adquieren en el camino, tales como confiar en sí mismos, ser perseverantes y vencer sus propios miedos.
El empresario jalisciense refirió que cuando inició Omnilife, en 1991, su familia le decía que tuviera cuidado "porque era peligroso y capaz que se morían los clientes, es decir, aún no inventábamos el producto y ya me estaban diciendo que tuviera miedo".
En entrevista, con motivo de los 25 años de la fundación de la empresa, recordó que para iniciar Omnilife también invitó a algunos de sus familiares para que lo apoyaran con capital, pero sólo dos lo hicieron, porque los demás no confiaban en el proyecto.
Mientras que cuando comenzó a vender vitaminas líquidas "de mil pesos por litro me dijeron que estaba loco, pero nunca hice caso, tenía muy firme la visión de lo que quería lograr, por lo que yo les recomiendo que tengan visión y sean persistentes".
Señaló que el producto debe cubrir una necesidad, puesto que la idea de vender vitaminas comenzó cuando se tenía que levantar todas las mañanas, a las cuatro de la mañana, para freír carne de puerco y venderla a quienes hacían tortas ahogadas.
"Entregaba la carne y después abría mi propio local en plaza Tepeyac, como consecuencia del desgaste empecé a engordar, a tener enfermedades, gastritis, el colesterol alto y también los triglicéridos, por lo que traté de sanarme con suplementos", abundó Vergara.
Así, comentó que cuando inició a vender sus productos, "los cuales eran costosos y difíciles de entender en ese momento", la razón principal fue que él tomaba alrededor de 120 tabletas de vitaminas, por lo que decidió hacer vitaminas en líquido.
De igual forma, señaló que los emprendedores siempre deben aprender de los errores. "Algo que yo he aprendido es que equivocaciones van a darse muchas, la gran diferencia es que quien aprende de ellas es el que crece y alcanza el éxito".
El empresario mexicano recordó cuando compró al equipo de futbol mexicano Chivas del Guadalajara, en 2002, y posteriormente creó una franquicia con el mismo nombre en Estados Unidos, la cual actualmente ya no existe.
"Chivas se trató de un proyecto en el que nadie creía, pero que finalizó con la creación Chivas USA, un proyecto que fracasó como marca, pero que financieramente no estuvo mal, del cual también aprendimos lecciones", destacó.
Así, refirió que en México aún "no nos creemos capaces de emprender, sin embargo, para el país es indispensable que los pequeños negocios crezcan, si es que se quiere contar con el empleo suficiente para la gente que sale de las universidades".
En ese sentido, dijo que el programa de televisión en el que participa, denominado Shark Thank, es una muestra de ello, pues con él les decimos a los jóvenes: "si eres creativo, tienes iniciativa y un buen proyecto, bienvenido, te vamos a ayudar a crecer".
Sin embargo, reconoció que dentro de dicho universo existe una mezcla de gente tanto con ideas que no funcionan, como personas que se quieren hacer millonarias de manera inmediata, y gente que realmente hace emprendedurismo.
"México es un país con un potencial bestial, con potencial para crecer hasta donde nos propongamos, por lo que lo único que podría decirles a los emprendedores que necesitan es creer en sí mismos, que no hagan caso a quien les dice que les va a ir mal, y que sean perseverantes", puntualizó.
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