Ford está a punto de proporcionar un nuevo estímulo al sector de fabricación automovilística de México el viernes con el anuncio de 2.5 mil millones de dólares en inversiones de manufactura, brindándole aún más credibilidad a la reputación de la nación azteca como creciente potencia automotriz.
Ford, cuya sede está en Michigan, está planeando invertir 1.3 mil millones de dólares en la expansión de una fábrica de motores en el estado norteño de Chihuahua y 1.2 mil millones de dólares en una nueva planta de cajas de cambios en el estado central de Guanajuato, según han declarado personas familiarizadas con el tema. Ford se negó a hacer declaraciones.
La noticia surgió después de que Toyota confirmara esta semana que gastará alrededor de mil millones de dólares en la construcción de una nueva planta, también en Guanajuato, poniendo así fin a una moratoria de tres años en la construcción de nuevas fábricas de la mayor compañía automotriz en ventas del mundo.
Las inversiones mexicanas de Ford y Toyota, las cuales pueden generar hasta 6,000 empleos, enfatizan el impresionante ascenso de la industria automotriz durante las últimas décadas en esta economía emergente.
En 1985, México representó sólo el 3 por ciento de la producción de automóviles ligeros en Norteamérica, de acuerdo con LMC Automotive, una compañía consultora. El año pasado, esta cifra alcanzó casi 20 por ciento, mientras que EEUU experimentó una pérdida de un porcentaje similar durante el período.
Los fabricantes automovilísticos de todo el mundo han invertido en México durante los últimos años, atraídos por una mano de obra barata y aranceles más bajos debido a la extensa red de acuerdos de libre comercio.
Las inversiones en México están principalmente destinadas a producir automóviles para EU, el segundo mercado automotriz más grande del mundo después de China. En la actualidad, las ventas en EU se encuentran en su nivel más alto desde la crisis financiera.
"EU está perdiendo oportunidades ante México", declara Karl Brauer, analista de Kelly Blue Book, una compañía de investigación automovilística. "¿Quién hubiera pensado que México sería más conducente que EU para la fabricación de automóviles debido a que cuenta con más rutas comerciales y costos más consistentes?"
Desde mediados de 2013, Nissan, Honda y Mazda han inaugurado nuevas plantas en México. BMW y Audi están construyendo instalaciones en México, resaltando cómo un país que alguna vez fuera el lugar para construir automóviles pequeños de bajo costo está ahora obteniendo también un porcentaje del mercado de automóviles de lujo.
El argumento comercial para la fabricación en México es convincente. Según las investigaciones de Evercore ISI, los costos laborales por hora promedio, excluyendo beneficios, pueden ser tan bajos como de 8 a 10 dólares. En comparación, Ford, General Motors y Chrysler Fiat Automobiles pagan un promedio de 48 a 58 dólares por hora en sus fábricas estadounidenses.
A pesar de los rumores acerca de los problemas iniciales en la nueva planta de Honda, México se ha deshecho de la mayor parte de su reputación relacionada con mala calidad, y también ofrece sólidas redes de infraestructura y transporte. En la actualidad existe un prestigioso grupo de fabricantes automovilísticos en zonas industriales del centro y norte de México.
A las llamadas 'maquiladoras' se les permite importar materiales y equipo, así como exportar productos manufacturados, libres de impuesto bajo el Tratado de Libre Comercio de América del Norte de 1994, del cual forman parte EEUU, México y Canadá.
Ildefonso Guajardo, ministro de economía mexicano, comentó al Financial Times: "Más que los incentivos, a veces lo más importante es garantizar que las plantas tengan una buena logística en términos de infraestructura pública".
Guajardo declaró que la oleada de inversiones en el sector bajo la actual presidencia, tanto por parte de los fabricantes de automóviles como de los fabricantes de repuestos, alcanza casi $20 mil millones y generará 50,000 empleos. México ha crecido hasta convertirse en el séptimo productor de automóviles más grande y en el cuarto mayor exportador del mundo. "En 2020 esperamos que, con toda esta inversión, la producción del año pasado de alrededor de 3.2 millones de automóviles se eleve a 5 millones", expresó Guajardo.
El crecimiento en México es parte de un traslado hacia el sur de la producción automovilística norteamericana, señala Justin Cox de LMC. Sin embargo, con compañías como Volvo anunciando planes de expansión en EU, algunos analistas advierten que la capacidad de Norteamérica pudiera estarse adelantando a la demanda en EU.
También te puede interesar
La corrupción es un asunto de alto riesgo en Brasil
EU a punto de dejar de ser importador neto de energía
El cielo es el límite para Amazon Web Services
Financial Times