Hay algunos que se estremecen cuando se menciona el tequila; bien recuerdan las malas decisiones y dolorosas resacas del pasado. Pero cada vez más personas están creando recuerdos nuevos y placenteros con respecto a la bebida: en la última década, el tequila ha sido el rey de una de las categorías de mayor crecimiento en el mundo de los licores. Las marcas de lujo han ayudado a cambiar la conversación sobre la exportación icónica mexicana. Ya no se considera solamente como el combustible de las fiestas. En vez se está comenzando a asociar con los gustos sofisticados y la inteligencia cultural.
En EU, donde se bebe el 80 por ciento de las exportaciones globales, los ingresos de los proveedores de tequila aumentaron 140 por ciento entre 2003 y 2015, según datos proporcionados por el Consejo de Licores Destilados de EU. Las marcas de lujo han visto un crecimiento de cerca de 600 por ciento en el mismo período. O sea, los consumidores están tomando más tequila de alta calidad, una tendencia que parece seguir al alza.
Este cambio ha allanado el camino para apoyar la popularidad de otro licor de agave. Para el pesar de las marcas establecidas de tequila, el mezcal parece haber capturado el espíritu moderno "hipster" que le pertenecía al tequila.
El mezcal a menudo es descrito como el "primo ahumado del tequila" pero realmente es la madre del tequila. Hace siglos, antes de que el tequila fuera el tequila, era conocido como mezcal, un licor que provenía del pueblo de Tequila en el estado de Jalisco. A diferencia del tequila, el mezcal puede producirse no sólo con el agave azul, sino con muchas variedades de agave, tan diferentes entre sí como el Cabernet y el Pinot Noir. La amplitud de sabores y estilos contribuyen a la atracción del mezcal.
Mientras que la industria del tequila ha sido criticada por académicos y organizaciones de consumidores por haber abandonado los tradicionales métodos de producción y adoptado métodos automatizados rentables, el mezcal es totalmente rústico. Es fabricado en remotas aldeas indígenas, en destilerías destartaladas sin electricidad con techos de paja. Los agaves se cocinan en fosos subterráneos, se muelen con molinos de piedra o mazos, y entonces se fermentan y se destilan en pequeñas cantidades.
Algunas variedades del agave son cosechadas en su estado silvestre (mientras que el agave azul es cultivado) y pueden tardar entre 20 y 30 años para madurar. Ya que las variedades y los métodos de producción pueden variar dependiendo de la región o aldea, cada mezcal es exclusivo de su región.
En esta era de creciente demanda de alimentos locales y obsesión con la producción artesanal, los consumidores son atraídos por la historia del licor. El mezcal, que a menudo es embotellado con un mayor grado de alcohol que el tequila, se comercializa como una alternativa auténtica y pura al tequila.
Según el Consejo Regulador del Mezcal (CRM), las exportaciones del mezcal aumentaron 128 por ciento entre 2011 y 2015. Pero el valor total de la industria, 106.5 millones de dólares, es una fracción del mercado global del tequila que vale 6.7 mil millones de dólares. El mezcal sigue siendo un producto especializado, lo cual no es sorprendente dado que una botella normalmente cuesta no menos de 40 dólares y las botellas de edición especial pueden llegar a costar más de 200 dólares.
El surgimiento del mezcal tal vez beneficie al tequila. Podría expandir la categoría para incluir todos los licores de agave de México, lo cual podría fortalecer la visibilidad total. Sin embargo, el ascenso del mezcal ha causado incertidumbre en el mercado del tequila. Este año, como respuesta a la popularidad del mezcal, Maestro Dobel, una marca de lujo de la compañía Cuervo, lanzó el primer "tequila ahumado".
La industria del tequila sigue teniendo posibilidades de crecimiento. Las exportaciones, que hasta hace poco estaban enfocadas en EU, ahora se están moviendo a Asia y a los mercados emergentes en América Latina.
También te puede interesar:
SoftBank, motivo de cautela en Silicon Valley
Exxon apoya medidas contra cambio climático
Petroleras, "amenazadas" por autos eléctricos
Financial Times