El debilitado peso mexicano finalmente repuntó, registrando la mayor alza entre las principales monedas en los últimas seis jornadas hasta el lunes.
El avance de 3.17 por ciento en los últimos días, de acuerdo con datos de Bloomberg, se produce antes de las elecciones mexicanas del domingo, que probablemente tendrán como ganador a Andrés Manuel López Obrador.
Pero unos días antes de que los mexicanos se dirijan a las urnas, los inversionistas están abandonando sus posiciones en descubierto y están apostando al hecho de que el mercado ya descontó una victoria de López Obrador.
"El repunte continúa mientras se activan órdenes de pérdida en algunas posiciones en descubierto", dijo Danny Fang, analista de BBVA en Nueva York.
"El optimismo subyacente se produce ya que los mercados descuentan el resultado electoral más probable en México".
López Obrador ha mostrado durante bastante tiempo una ventaja en las encuestas y actualmente está 19 puntos por encima del candidato en segundo lugar, Ricardo Anaya, según el Barómetro Electoral Bloomberg.
Las apuestas en descubierto sobre el peso mexicano cayeron casi a la mitad en la semana que finalizó el 19 de junio, según los últimos datos disponibles de la CFTC.
El fondo que cotiza en bolsa iShares MSCI México también ha subido durante los últimos tres días, lo que indica un retorno a los abatidos activos del país.
El titular de operaciones y sistemas de pago de Banxico, Jaime Cortina, dijo que los mercados no se verán afectados por una victoria de López Obrador, ya que la victoria estaría descontada hace mucho tiempo.
"El candidato puntero pues lleva siendo puntero prácticamente toda la campaña. Entonces yo sí soy de la impresión que el mercado ya descontó con una alta probabilidad que ese equipo sea el que resulte ganador", dijoCortina.
Sin embargo, el directivo de la entidad monetaria aclaró que la necesidad de "ajustes bruscos" en los mercados tras conocerse el resultado también dependerá de cuál sea el mensaje del equipo del candidato respecto a lo que piensan hacer en materia de política macroeconómica.
"Si uno ve lo que los distintos voceros y asesores han venido mencionando, pues parecería que no debería ser ninguna sorpresa. Si ese mensaje se ratifica, (...) si bien a lo mejor podríamos ver algo de volatilidad, algo de movimientos, deberían de ser bastante moderados", agregó Cortina.
Alfonso Romo, un asesor de alto rango de la campaña de López Obrador, dijo el lunes que, de ser elegido presidente, su gobierno buscaría fortalecer el peso aumentando la confianza de los inversores.
El banco central de México elevó su tasa de interés de referencia en 25 puntos básicos a 7.75 por ciento el 21 de junio, en un intento por contrarrestar los efectos del desplome del peso y mantener una tendencia a la baja en la inflación.
La posición relativa de la política monetaria con Estados Unidos es una de las variables que el Banco Central de México toma en cuenta a la hora de adoptar decisiones de política monetaria y "siempre ha sido un elemento importante", según su directivo.
"Todavía es probable que veamos nuevas incertidumbres políticas o de política monetaria después de las elecciones", dijo Danny Fang, analista de BBVA. "Pero todavía hay tiempo antes de que la nueva administración asuma el 1 de diciembre. Por ahora, hay posibilidades de que el peso mexicano suba en el corto plazo".
Con información de Reuters