Las posiciones especulativas a favor de la moneda mexicana en el Chicago Mercantile Exchange (CME) llevan dos semanas consecutivas a la baja, ante un contexto de volatilidad e incertidumbre en torno al Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), entre otros factores.
En términos de dólares, las posiciones a favor del peso mexicano en el CME, un termómetro de la confianza, se reportaron en 2 mil 270 millones al primero de mayo, con base en cifras dadas a conocer por Bloomberg.
"La postura en contra del peso en el mercado de futuros de Chicago se explica fundamentalmente por la fortaleza del dólar en el mercado internacional, apoyada por las mayores tasas de interés de los bonos norteamericanos, a lo que se ha sumado una cierta decepción en el mercado por el alargamiento en las negociaciones encaminadas a modernizar el TLCAN", explicó Jorge Gordillo, director de análisis económico de CIBanco.
La pérdida de apetito por el peso en CME se aceleró desde mediados de abril, en línea con el incremento en tasas de interés en Estados Unidos y de la fortaleza del billete verde en el mercado internacional, luego de que la tasa de interés que paga el bono norteamericano a 10 años pasó rápidamente de 2.80 por ciento a tocar, incluso, un nivel por arriba del 3.0 por ciento.
Además, la demanda de dólares se ha visto impulsada por el efecto de la búsqueda de refugio, ante los temores de una guerra comercial entre Estados Unidos y naciones como China.
El índice que mide el comportamiento del dólar frente a una canasta de 10 divisas se ha apreciado en 3.54 por ciento del 16 de abril, al cierre de la semana pasada.
Juan Carlos Alderete, estratega de divisas de Banorte-Ixe, señaló que el desempeño que ha tenido el peso mexicano se debe a lo que en el mercado se conoce como un 'short squeeze', en donde los inversionistas que esperaban una caída del dólar tuvieron que revertir sus posiciones muy rápidamente, causando un alza súbita del dólar.
A eso se añade que los inversionistas estaban muy largos en pesos, es decir, muy alcistas, y también tuvieron que revertir sus posiciones.
"A partir de la próxima semana se incrementará la posibilidad de que el peso tenga un respiro, si hay noticias concretas del TLCAN", previó Alderete.
A pesar de la baja en las apuestas a favor de la moneda mexicana, todavía están lejos de los niveles de tensión que se observaron durante la crisis inmobiliaria en Estados Unidos en 2008, la crisis petrolera de mediados de 2014 y, más recientemente, con la llegada de Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos.
Para ambos especialistas, el factor vinculado con las elecciones en México no ha tenido todavía un papel relevante en el ánimo de los participantes del mercado cambiario, aunque más adelante puede ganar terreno.
Las cifras en el CME son un indicador clave debido a que muestra los sentimientos de los inversionistas con respecto al peso mexicano en el mercado de derivados, instrumentos que sirven para poder cubrir o transferir riesgos.
En el CME se negocia diversos tipos de instrumentos financieros como tasas de interés, acciones, monedas, así como también productos primarios (commodities).
El monto neto de las apuestas con relación al peso, es poco significativo, lo importante es el sentimiento que reflejan.