El Banco de México llevó a cabo una subasta sindicada de un bono, el cual servirá de nueva referencia para el plazo a tres años, en un entorno de elevada volatilidad y en donde los rendimientos de corto plazo superan a los de un horizonte mayor.
El Gobierno Federal, a través de Banco de México (Banxico) como agente financiero, colocó este miércoles 25 mil millones de pesos en bonos a tres años con tasa fija, a través de una subasta sindicada.
El nuevo bono de referencia a tres años, con vencimiento el 9 de diciembre de 2021, pagará un cupón de 7.25 por ciento cada seis meses, mientras que ofrecerá a los inversionistas un rendimiento inicial de 7.22 por ciento, con base en información proporcionada por la Secretaria de Hacienda.
La tasa de arranque del nuevo bono de referencia está por debajo del rendimiento proporcionado por el Cete a plazo de 3 meses, el cual se reportó ayer en 7.61 por ciento, de acuerdo con datos publicados por Bloomberg.
Una tasa invertida implica que los inversionistas tienen un mayor apetito por instrumentos con vencimiento a un menor plazo, como respuesta a temores de un alza mayor en las tasas de interés en el exterior, así como ante factores de incertidumbre como la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte y el proceso de elecciones internas.
Regularmente, los instrumentos de largo plazo tienden a dar un rendimiento mejor que los de corto plazo.
La demanda de los nuevos bonos contó con más de 80 órdenes de inversionistas nacionales y extranjeros, superando los 49 mil millones de pesos, lo que representó cerca de 2 veces a lo ofrecido.
Algunos participantes en el mercado esperaban una baja demanda, debido a que la curva de rendimiento en el país está invertida y, usualmente, eso implica cautela de los inversionistas.
"A pesar de la volatilidad observada en los mercados internacionales, la transacción fue bien recibida por los inversionistas y se llevó a cabo en condiciones favorables para el gobierno federal", señaló la Secretaría de Hacienda en un comunicado.
Actualmente, la tenencia de los bonos a plazo de tres años está dominada por los inversionistas extranjeros, por lo que su demanda depende con mucho de su participación en las subastas de este tipo de instrumentos.
La composición de tenencia de extranjero del bono a 3 año con vencimiento en junio del 2020 se distribuye de la siguiente manera: bancos locales, 7 por ciento; inversionistas extranjeros el 44; afores y sociedades de inversión 16, y otros inversionistas nacionales 33 por ciento.
Según analistas de Banorte-Ixe, la demanda extranjera por estos bonos es elevada, debió a una valuación atractiva respecto a instrumentos similares en mercados emergentes con perfil crediticio equiparable al de México.
La nueva colocación del bono a tres años es la primera efectuada en este año bajo el método sindicado y, hasta el momento, es la única programada para lo que resta de este año.
Las subastas sindicadas permiten colocar un monto inicial significativo de nuevas referencias de bonos entre un gran número de inversionistas, además de que garantizan mejores condiciones de liquidez en el mercado secundario. Asimismo, contribuyen a que las nuevas referencias sean elegibles desde el inicio en los índices globales de renta fija en los que participa México.
La colocación realizada se suma a los ocho mil 500 millones de dólares que se colocarán de forma regular cada cuatro semanas, durante el segundo trimestre.