La mezcla mexicana de exportación regreso al nivel de los 69 dólares por barril, impulsado por la expectativa de que la producción a nivel global continúe disminuyendo, de acuerdo con un análisis de Banco Base.
Este lunes, el precio del petróleo mexicano registró una ganancia de 48 centavos de dólar frente a su cotización del viernes pasado, para venderse en 69.02 dólares el barril, de acuerdo con información de Petróleos Mexicanos (Pemex).
Esta es la segunda vez, en lo que va del mes, que el precio del crudo de exportación de Pemex superó el nivel de los 69 dólares y las expectativas es que continúen su recuperación.
De hecho, el precio de la mezcla se subió a la recuperación de los principales referenciales, luego que los mercados de Londres y Nueva York se caracterizaron por una sesión volátil impulsados por las expectativas de que los problemas de producción en Canadá se extiendan hasta septiembre y el avance de las posibles sanciones contra Irán, además de un menor bombeo de Libia.
El petróleo estadounidense West Texas Intermediate (WTI) registró una ganancia de cinco centavos para venderse en 73.85 dólares por barril, mientras que el Brent repuntó 96 centavos luego que sus posturas de venta se fijaran en 78.07 dólares por unidad.
La fuerte recuperación del Brent fue impulsada, principalmente, a la política de Estados Unidos (EU) con respecto a las importaciones globales de crudo iraní, lo cual podría llevar al mercado a observar un déficit de crudo; el objetivo de la administración estadounidense es disminuir las ganancias que obtiene Irán a través de las exportaciones de este hidrocarburo.
Banco Base refirió que según personas con conocimiento sobre el tema, Japón probablemente dejará de comprar petróleo a Irán después de septiembre, mientras que la embajada de Corea del Sur mencionó que el gobierno coreano negocia con EU exenciones de las restricciones a las compras de crudo a Irán.
Estados Unidos dice que quiere reducir a cero para noviembre las exportaciones petroleras de Irán, el quinto mayor productor mundial de crudo, una medida que obligaría a otros grandes productores como Arabia Saudita a bombear más.
El hecho de que los países se vean obligados a disminuir su consumo de petróleo iraní ante las posibles sanciones que el gobierno estadunidense pueda imponer, reduce de manera artificial la oferta global del hidrocarburo e impulsa su precio.
Adicionalmente a las sanciones iranís, la administración de Donald Trump también amenaza con imponer penalizaciones a Venezuela, debido a la falta de democracia que existe en el país, lo que disminuiría aún más la oferta de crudo venezolana y, por ende, la oferta mundial.
Por otra parte en Canadá, la paralización de una instalación de Syncrude, con capacidad de 360 mil barriles diarios, ha reducido los flujos hacia Cushing en Oklahoma, el punto de entrega de los contratos de futuros del crudo en Estados Unidos y donde los inventarios tocaron mínimos de tres años y medio la semana pasada.
El accionista mayoritario Suncor Energy dijo el lunes que parte de la producción de Syncrude podría restablecerse en julio, antes que lo previsto. Pero la operación total, se reanudaría a principios de septiembre, más tarde que lo esperado.
A su vez, la preocupación por una menor producción de Libia también impulsó los precios. El bombeo libio ha caído a menos de la mitad en cinco meses, a unos 527 mil barriles diarios, dijo el lunes el líder de la Corporación Nacional Petrolera (NOC), Mustafa Sanalla.