Ni la ‘tormenta’ en los mercados detiene el apetito por el peso

Las apuestas a favor de la moneda mexicana en el Chicago Mercantile Exchange (CME) se mantienen cerca de máximos del año, a contracorriente de la turbulencia en los mercados originada por temores a mayores tasas de interés en Estados Unidos y por la incertidumbre con respecto al futuro del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).

En términos de dólares, las posiciones a favor del peso mexicano en el CME, un termómetro de la confianza, se ubicaron en 2 mil 461 millones, al cierre del pasado febrero, de acuerdo con información compilada por Bloomberg.

Sin embargo, en el corto plazo, el clima para el peso mexicano se ha nublado, principalmente por el resurgimiento de prácticas proteccionistas en Estados Unidos.

"Es poco probable que se observen avances significativos en la séptima ronda de renegociación del TLCAN, sobre todo ahora que Estados Unidos anunció la implementación de medidas arancelarias contra las importaciones de acero y aluminio. Desde el comienzo de la semana, el panorama para la séptima ronda se volvió sombrío con la noticia de que el negociador en jefe de Estados Unidos sobre el tema de reglas de origen, Jason Bernstein, se retiró de las mesas de negociación, evento que también generó presiones al alza para el tipo de cambio", explicó Gabriela Siller, directora del área de Análisis de Banco Base.

Las cifras en el CME son un indicador clave, debido a que muestran los sentimientos de los inversionistas con respecto al peso mexicano en el mercado de derivados, instrumentos que sirven para poder cubrir o transferir riesgos.

En el CME se negocian diversos tipos de instrumentos financieros como tasas de interés, acciones, monedas, así como también productos primarios (commodities).

Las apuestas a favor del peso en el mercado de futuros se mantienen cerca del máximo del año, también a contracorriente de la reciente recuperación del dólar y del fuerte repunte en las tasas del bono norteamericana a 10 años, el cual alcanzó en días pasados un máximo de cuatro años.

El número de contratos que apuestan a una caída del peso mexicano ascendió a 27 mil 637, mientras que las apuestas alcistas totalizaron 120 mil 144 en la semana terminada al cierre de febrero.

A pesar de la turbulencia, en el mercado de instrumentos especulativos, las apuestas a favor del peso se mantiene laterales y cerca de su máximo registro en el año, lo que muestra que no se ha perdido del todo la confianza.

Factores de riesgo

La semana será clave para el peso mexicano, debido a factores tanto externos como internos.

En primer lugar, el lunes se conocerían las conclusiones de la séptima ronda de negociaciones del TLCAN. En segundo, destaca la firma de Donald Trump de un decreto que autorice la aplicación de aranceles a las importaciones de estados Unidos de acero y aluminio, en donde quizá se den detalles de los países afectados con esta medida.

En el radar, también estará la publicación del informe económico de la Reserva Federal, conocido como el Beige Book, con lo que se tendrá un panorama más preciso de los pasos que dará el instituto central.