La viabilidad de operar una estación de servicio de combustible está siendo cuestionada por los grupos gasolineros, debido a que están enfrentando un menor margen comercial, un mayor costo de operación y regulaciones, dijo Mauricio González Puente, tesorero y consejero de la Organización Nacional de Expendedores de Petróleo (Onexpo) en Nuevo León.
"Muchos negocios ya no son rentables. La gente se quedó con esa idea de cuando había en Nuevo León 20 gasolineras, ahora hay casi 700, y el parque vehicular no ha crecido en la misma proporción que el número de gasolineras, los carros son más eficientes y hay que sumarle que te quitan comisión y te meten más regulaciones; el gasolinero está frito", dijo.
El directivo señaló que si se comparan las ventas de gasolina en Nuevo León de enero de 2017 con las del mismo mes del año pasado, estas bajaron entre un 10 y un 15 por ciento.
Añadió que "antes el margen comercial que nos daba Pemex era de 6.5 por ciento de comisión y ahora nos venden a cierto precio según regiones, si se vende al precio máximo el margen es de 5.7 por ciento, y si sigue así (las ventas) y aumenta el precio es muy probable que seguiría bajando el margen, además que tenemos que cumplir con más regulaciones, por lo que algunos compañeros se cuestionan seriamente la viabilidad de sus negocios que son en su mayoría familiares".
Sobre la viabilidad de importar gasolina al país el consejero de Onexpo señaló que existen diversos factores que dificultan dicha práctica.
Entre ellos está la poca capacidad de almacenamiento por parte de particulares, la incompatibilidad de las normas para la fabricación de gasolina entre ambos países, el constante cambio de precios del dólar, el petróleo y el subsidio federal.
En el tema de logística el "traer el combustible a Monterrey prácticamente
tienes que cruzar por zonas no tan seguras y los seguros contra robos son muy caro".
Monterrey