Una nueva fisura que emite lava y vapor impulsó el domingo a las autoridades en Hawái a ordenar más evacuaciones mientras los residentes se preparan para una erupción del volcán Kilauea.
La Defensa Civil del condado Hawái emitió un alerta de que se descubrió una 18va fisura junto a un camino al oeste de una importante carretera en la Isla Grande. A los residentes se les dijo que tenían que dejar sus hogares, y dos centros comunitarios en el área están funcionando como albergues para personas y mascotas.
Era posible escuchar ruidos de explosiones y fluidos que salían de la fisura a una distancia de hasta mil 400 metros (mil 500 yardas).
Las fisuras, la deformación en el terreno y la abundancia de gases volcánicos indican que las erupciones en el flanco este del Kilauea probablemente continuarán.
La nueva serie de emisiones ocurrió por la mañana, luego que otras dos fisuras se abrieron el sábado. La mayoría de los brotes de lava se han producido en el vecindario de Leilani Estates y sus alrededores, donde lava ardiente ha salido del suelo y ha destruido más de una veintena de hogares. Se emitieron órdenes de evacuación para unas 2 mil personas.
El Servicio Geológico de Estados Unidos indicó que la 17ma fisura, que se abrió el sábado por la noche, salpicaba un poco de lava, pero no se había formado un flujo. La 16ma arrojó lava a un campo previamente en el día.
El Observatorio de Volcanes de Hawái reportó que las fisuras se abrieron justo al este de la planta Puna Geothermal Venture, donde se hace subir a la superficie vapor y líquido caliente a través de pozos subterráneos y el vapor alimenta una turbina que genera electricidad. Como precaución, los trabajadores de la planta retiraron del lugar la semana pasada 41 mil 600 litros (50 mil galones) de un gas inflamable.
Los geólogos advierten que el volcán Kilauea pudiera tener una erupción explosiva que arrojaría rocas y cenizas a kilómetros del cráter.