MOSCÚ.- Vladimir Putin dijo que la confianza entre Estados Unidos y Rusia se ha erosionado bajo el Gobierno del presidente Donald Trump, mientras Moscú ofrecía un recibimiento inusualmente hostil al secretario de Estado, Rex Tillerson, en medio de una confrontación sobre el conflicto en Siria.
Las esperanzas en Rusia de que el Gobierno de Trump fuera precursor de unas relaciones menos conflictivas se desvaneció la semana pasada, después de que Estados Unidos disparó misiles contra una base aérea en Siria para castigar al aliado de Moscú por un presunto uso de gas venenoso.
Justo en el momento en que Tillerson se sentaba para hablar con su homólogo ruso, un alto cargo de Moscú arremetía contra la retórica estadounidense "primitiva y grosera", en medio de una serie de declaraciones que parecían cronometradas para maximizar la incomodidad durante la primera visita de un miembro del gabinete de Trump.
"Uno podría decir que el nivel de confianza en términos de trabajo, especialmente en el ámbito militar, no ha mejorado, sino que se ha deteriorado", dijo Putin en una entrevista emitida en la televisión rusa momentos después de que Tillerson se sentara con el ministro de Exteriores ruso, Sergei Lavrov, en un ornamentado salón.
Putin confirmó el apoyo de Rusia al presidente sirio, Bashar al-Assad, reiterando que el mandatario no fue responsable del ataque con gas ocurrido la semana pasada y añadiendo una nueva teoría respecto a que el ataque pudo haber sido montado por los enemigos del líder sirio.
El portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, dijo que Tillerson podría reunirse con Putin este miércoles si los dos responsables diplomáticos decidían que era útil informar al presidente ruso sobre sus conversaciones. Pero Peskov tampoco se abstuvo de hacer críticas, diciendo que las llamadas de las potencias occidentales a Rusia para dejar de apoyar a Assad equivalían a dar carta blanca a los terroristas.
La hostilidad de Moscú hacia funcionarios de la administración Trump supone un drástico cambio desde el año pasado, cuando Putin elogió a Trump como una figura fuerte.