En un intenso debate, la 48 Asamblea General de la Organización de Estados Americanos (OEA), aprobó por 19 votos a favor, 4 en contra y 11 abstenciones, iniciar el proceso para suspender a Venezuela del organismo continental.
Ahora la OEA deberá convocar a una cumbre extraordinaria para obtener el apoyo de 24 naciones para lograr la expulsión de Caracas, de acuerdo con la propuesta presentada por Argentina, Brasil, Canadá, Chile, Estados Unidos, México y Perú, por considerar fraudulenta la reelección del presidente Nicolás Maduro, en los comicios del pasado 20 de mayo.
La iniciativa declaró ilegítima la reelección de Maduro y llamó a aplicar los mecanismos de la Carta Democrática Interamericana por "alteración del orden constitucional", un proceso que podría derivar en la suspensión de Venezuela de la OEA.
El debate en la llamada "comisión general" del organismo fue agrio, largo y con constantes enfrentamientos entre Venezuela y sus aliados -Bolivia y Antigua y Barbuda- y algunos de los 14 integrantes del Grupo de Lima, como México, Colombia y Argentina, que instó en numerosas ocasiones al país caribeño a agilizar la discusión.
La embajadora venezolana ante la OEA, Carmen Luisa Velásquez, se quejó de que el resto de Estados no hayan tomado en cuenta a su país para elaborar una resolución sobre asuntos internos y criticó que el texto se hubiera hecho público el lunes, sin tiempo para que su representación pudiera estudiarlo.
"No se tomó en cuenta la decisión de Venezuela, la voluntad de Venezuela, lo que se hizo fue decidir por Venezuela", consideró Velásquez en esa comisión.
También se acordó una declaración para pedir el "cese inmediato" de la violencia en Nicaragua, aunque no se dirigió esa petición al presidente Daniel Ortega, al que grupos humanitarios señalan como responsable de la muerte de 127 opositores.