En la víspera de su encuentro con el presidente ruso, Vladimir Putin, el presidente estadounidense, Donald Trump, sacudió a los aliados una vez más al etiquetar a la Unión Europea de "enemigo" con respecto al comercio.
En una entrevista con la cadena CBS News previa a la cumbre, emitida este domingo, Trump señaló que la UE junto a China y Rusia son adversarios económicos de Estados Unidos. "Creo que la Unión Europea es un enemigo, por lo que nos hacen en el comercio", señaló.
Al ser cuestionado sobre su "mayor enemigo global en este momento", Trump dijo "la Unión Europea es un enemigo de Estados Unidos (...) Rusia es un enemigo en ciertos aspectos y China es un enemigo económicamente".
También acotó que sus padres nacieron en los sectores de la Unión Europea y, que le encantan esos países, pero en un sentido comercial, "realmente se han aprovechado de nosotros, y muchos de esos países están en la OTAN ".
Trump y Putin se reunirán el próximo lunes en Helsinki para su primera reunión por separado desde que Trump asumió el cargo en enero de 2017. Trump llegó a Helsinki el domingo por la noche después de pasar el día jugando al golf en su club privado en Escocia.
La cumbre, que se realizará en una de las coyunturas más cruciales para Occidente desde la caída de la Unión Soviética en 1991, ha inquietado a algunos aliados en la OTAN que temen que Putin busque un gran acuerdo que socave la alianza transatlántica liderada por Estados Unidos.
Durante la cumbre de la OTAN de la semana pasada en Bruselas, Trump criticó reiteradamente a otros países miembros por no haber gastado más en defensa y cuestionó abiertamente el propósito de la alianza.
En los últimos meses también ha sido muy crítico con la UE en términos comerciales, argumentando que sus políticas hacen las cosas más difíciles a los exportadores estadounidenses.
Después de que Trump calificó a la UE como "enemigo", Donald Tusk, presidente del Consejo Europeo, respondió en Twitter utilizando una de las frases comunes favoritas de Trump. "Estados Unidos y la UE son los mejores amigos", escribió Tusk. "Quien diga que somos enemigos está difundiendo noticias falsas", añadió.
Trump y sus asesores han estado trabajando durante el fin de semana para moderar las expectativas respecto a resultados tangibles de la reunión con Putin.
"Voy con pocas expectativas", dijo a CBS en Turnberry, Escocia, donde permaneció tras su visita a Reino Unido y antes de viajar a la capital finlandesa. "No voy con muchas expectativas".
John Bolton, asesor de seguridad nacional de Trump, dijo en una entrevista con ABC que Estados Unidos no buscaría "resultados" y que la reunión sería "desestructurada", comenzando con una sesión cara a cara entre los dos líderes.
El embajador de Estados Unidos en Rusia, Jon Huntsman, dijo a la cadena NBC que la reunión era "un intento de ver si podemos calmar y quitar parte del drama, y francamente algo de peligro, de la relación actual".
Una investigación sobre acusaciones de intromisión rusa en las elecciones presidenciales estadounidenses de 2016 ha nublado la presidencia de Trump.
Un gran jurado federal de Estados Unidos acusó el viernes a 12 oficiales de inteligencia rusos de piratear redes de computadoras demócratas en 2016, el cargo más detallado hasta el momento de que Moscú se haya entrometido en las elecciones para ayudar al republicano.
Trump ha dicho en repetidas ocasiones que la investigación de la presunta injerencia rusa en las elecciones -que califica como una "caza de brujas amañada"- le dificulta llegar a acuerdos sustanciales con Moscú.
Pero las acusaciones ponen más atención sobre la relación de Trump con Putin, quien ha negado reiteradamente que Rusia haya intentado interferir en las elecciones que Trump ganó inesperadamente.