WASHINGTON .- Donald Trump no les está facilitando a sus principales partidarios y asesores, desde su compañero de fórmula para abajo, el defenderlo o explicar algunas de sus posturas de campaña.
En programas noticiosos dominicales, varios altos funcionarios de Trump, encabezados por el candidato republicano a la vicepresidencia Mike Pence, no pudieron decir si es que el magnate estaba apegándose o modificando su promesa central de deportar a los 11 millones de inmigrantes que viven en el país sin permiso, con la ayuda de un "equipo de deportación".
Y ellos no se molestaron en defender la respuesta inicial que dio el candidato el sábado sobre el asesinato de una madre de Chicago, prima del astro de la NBA Dwayne Wade, que fue baleada mientras caminaba con su bebé en la calle.
Cuando se le preguntó si es un problema que el nominado republicano a la presidencia haya dejado en el aire detalles cruciales sobre sus políticas de inmigración cuando falta poco tiempo para las elecciones, el presidente del Comité Nacional Republicano, Reince Priebus, objetó: "Yo simplemente no hablo por Donald Trump".
Fue un vistazo sorprendente al liderazgo del magnate sobre un equipo que había dicho le ayudaría a impulsarlo a la victoria en los comicios del 8 de noviembre.
El propósito de los funcionarios nombrados por un candidato es hablar por él y respaldarlo. Pero los de Trump pasaron apuros para hacerlo incluso mientras todos se apegaron a los detalles que conocen: que el multimillonario dará más detalles sobre su plan de inmigración más adelante, la política a seguir será humanitaria, y que pese a sus vacilaciones evidentes, ha sido "consecuente" sobre el tema. Cualquier discusión sobre incongruencias o tuits potencialmente indignos de un presidente, insinuaron Pence y otros simpatizantes de Trump, refleja el enfoque de los medios de comunicación en puntos equivocados.
Cuando se le preguntó si la propuesta del "equipo de deportación" delineado por Trump en noviembre seguía en pie, Pence respondió: "Bueno, lo que usted le escuchó describir ahí, con su usual manera sencilla de hablar al estilo estadounidense, era un mecanismo, no una política".
El gobernador de Indiana dijo que los principales principios del plan migratorio de Trump incluirán la construcción de un muro en la frontera sur y hacer que México pague por ello, ningún camino hacia la obtención de la legalización o la ciudadanía para las personas que se encuentren en Estados Unidos sin permiso, y mayor vigilancia de la Patrulla Fronteriza. Pence tampoco contestó si es que la campaña cree, tal como ha dicho Trump, que los niños nacidos en este país de padres que carecen de autorización para radicar en él no son ciudadanos. Eso, dijo, "es un tema para el futuro".
Los hijos nacidos en Estados Unidos de padres inmigrantes, incluso los de inmigrantes que viven en el país sin permiso, han sido considerados estadounidenses automáticamente desde que se aprobó la 14a Enmienda constitucional en 1868.
Últimamente Trump se ha enfocado en decir que deportará a la gente que vive en el país sin autorización y que ha cometido delitos. Pero el domingo seguía sin estar claro a quién considera el magnate como un delincuente.
"Esas son las cosas que Donald Trump va a contestar. Y esta no es una pregunta simple", dijo Priebus, quien ha tenido una relación difícil con el multimillonario.
Mundo