CLEVELAND.- Donald Trump aceptó anoche, en Cleveland, ser el candidato oficial del Partido Republicano a la Casa Blanca y se comprometió a convertir a Estados Unidos en el país de "la ley y el orden", restaurando la seguridad, la prosperidad y la paz, bajo el eje de poner al país sobre cualquier otro.
"La diferencia más importante entre nuestro plan y el de nuestros oponentes, es que pondremos a América primero. Americanización, no globalización, será nuestra doctrina", afirmó el magnate en su discurso de aceptación de la candidatura republicana.
A pesar de que prometió un país de generosidad y calidez, reafirmó su intención de construir un muro en la frontera con México y propuso suspender inmediatamente la inmigración de todos los países afectados por el terrorismo yihadista hasta que Estados Unidos tenga un sistema de escrutinio riguroso.
Construiremos un gran muro para detener la migración ilegal, a los traficantes y la violencia, y para evitar que las drogas infiltren nuestras comunidades.
Además advirtió que su gobierno no podrá darse el lujo de ser "políticamente correcto" y se comprometió con los estadounidenses a renegociar el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) y a sacar a su país de este acuerdo si no consigue las concesiones deseadas.
El republicano se erigió además como la voz de "los olvidados" de Estados Unidos. "He visitado a obreros despedidos y comunidades destrozadas por nuestros terribles e injustos acuerdos comerciales. Estos son los olvidados de nuestro país, personas que trabajan duro, pero que no tiene opciones y que no son escuchados", sostuvo, tras agradecer la candidatura.
"Con humildad y agradecimiento acepto su nominación a la presidencia de Estados Unidos", dijo en medio de los aplausos.legado de destrucción
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Mientras seamos liderados por políticos que no pongan a Estados Unidos primero, estaremos seguros que otras naciones no respetarán a Estados Unidos.
Añadió que Hillary Clinton, su rival demócrata en la contienda presidencial, dejó un legado de "muerte, destrucción y debilidad", tras su paso por el gobierno como secretaria de Estado. "El legado de Hillary Clinton no tiene que ser el de Estados Unidos. Los problemas a los que nos enfrentamos ahora -pobreza, violencia en casa, muerte y destrucción en el extranjero- continuarán siempre que mantengamos las mismas políticas que los crearon", aseguró Trump a los estadounidenses que están profundamente frustrados con la clase política en la Casa Blanca.
Además prometió acabar con el terrorismo del Estado Islámico (EI), arrancando la ovación de los asistentes.
El discurso de Trump clausuró cuatro días de una caótica convención consumida por una acusación de plagio, críticas inusualmente duras en contra de Clinton, y la espectacular negativa del senador de Texas, Ted Cruz, a respaldar al nominado republicano sobre el escenario de la reunión, que ahora dará paso a la Convención Nacional Demócrata que a partir del lunes iniciará en Filadelfia y en la que Clinton será confirmada como candidata.