CHILPANCINGO.- Dirigentes de la CETEG responsabilizaron a los titulares de los tres niveles de gobierno por la muerte de uno de sus compañeros y la agresión de que fueron objeto el resto de manifestantes en Tlapa este domingo antes, durante y después de la jornada electoral.
El líder magisterial Salvador Rosas Zúñiga también denunció la desaparición de tres maestros de la CETEG, aunque no supo decir los nombres de los supuestos desaparecidos, ni de los heridos.
Lamentó que "el gobierno federal le haya apostado al camino de la represión para imponer la farsa electoral" y agregó que en Tlapa, los militares "se anduvieron metiendo hasta a casas particulares para hacer detenciones".
Los maestros señalaron que todo fue provocado "con la intención de hacer ver el supuesto malestar social en torno a la lucha que hemos emprendido desde el 26 de septiembre".
Nos queda claro que fue la Policía Federal la encargada de confrontar al puedo con el pueblo, fue un grupo de paramilitares al servicio del Estado, creados por ellos y agitados por ellos
1
Al hacer uso de la palabra, Antonia Morales lamentó que en la elección del 7 de junio, "ganó el PRI a sangre y fuego, tan es así que tenemos compañeros muertos, lesionados y desaparecidos".
Por lo que exigió la salida de fuerzas militares y paramilitares de la entidad porque "Guerrero no es cuartel" y recriminó que "la respuesta a la demanda social fue con balas y golpes".
Sobre la entrega del edificio del ayuntamiento de Chilpancingo la madrugada del domingo, dijo que esa fracción de la CETEG se deslinda, porque quien mantenía en su poder el inmueble eran los cetegistas que encabeza el dirigente estatal de esa organización, Reyes Ramos Guerrero.
Walter Añorve Rodríguez, por su parte, convocó a los maestros guerrerenses a participar en una marcha el viernes 12 de junio para protestar por lo que calificaron como un golpe de autoritarismo, al referirse a los enfrentamientos que se registraron en Tlapa y Tixtla.