Chicago demandó al fiscal general de Estados Unidos, Jeff Sessions, por su amenaza de privar de financiación federal a las ciudades que no cooperan con la represión de la administración Trump contra los inmigrantes indocumentados.
La decisión del Departamento de Justicia de imponer "condiciones extensas" a Chicago y otras ciudades si no vigilan violaciones federales de inmigración es "inconstitucional y no tiene autorización", señaló la ciudad en una denuncia presentada este lunes.
La demanda se produce pocos días después de que el Departamento de Justicia diera a conocer nuevas condiciones para que las ciudades pudieran beneficiarse de una subvención que proporciona a los estados y ciudades financiamiento para sus departamentos de policía locales.
Las nuevas condiciones "se oponen a la política de la ciudad de larga data que promueve la cooperación entre la policía local y las comunidades de inmigrantes", dijo Chicago en la queja.
La demanda es la más reciente en desafiar el ataque de la administración Trump a la inmigración ilegal. A principios de este año, la ciudad y el condado de San Francisco y el condado de Santa Clara, en California, ganaron una suspensión temporal de la ejecución de la mayor parte del decreto presidencial del 25 de enero de Trump amenazando con retener fondos de localidades que no cooperan.
Para poder acceder a la subvención federal, llamada Edward Byrne Memorial Justice Grant, las ciudades y los estados están ahora prohibidos de imponer restricciones sobre el intercambio de información local sobre el estatus migratorio con el Gobierno de Estados Unidos.
También deben proporcionar al Departamento de Seguridad Nacional acceso ilimitado a las comisarías para interrogar a los detenidos y notificarlo por lo menos 48 horas antes de la liberación de alguien sospechoso de violaciones inmigratorias.
El año pasado, Chicago recibió 2.3 millones de dólares bajo la subvención. El presupuesto de Chicago para 2017 es de 9 mil 800 millones. La ciudad recibió cerca de mil 260 millones en financiación federal total en 2016 y espera que eso se eleve a mil 590 millones este año.
"ESPECIALMENTE TRÁGICO"
"En 2016, más chicaguenses fueron asesinados que en la ciudad de Nueva York y Los Ángeles juntos", dijo el portavoz del Departamento de Justicia Devin O'Malley en un correo electrónico.
"Así que es particularmente trágico que el alcalde esté menos preocupado con esa cifra asombrosa de lo que está gastando tiempo y dinero de los contribuyentes para proteger a extranjeros delincuentes y poner a la policía de Chicago en un riesgo mayor".
En su demanda, Chicago quiere que un juez federal en la ciudad declare las nuevas condiciones ilegales.
"Estas condiciones federalizan en la práctica los centros de detención locales y violan la Cuarta Enmienda en los casos en que los detenidos son legalmente aptos para ser puestos en libertad bajo custodia policial", dijo la ciudad en su comunicado de prensa.