CIUDAD DE MÉXICO.- Las dos torres de telecomunicaciones que serían una de las principales responsables de los deslaves en Santa Fe, se instalaron en el trienio (1997-2000) de la exjefa delegacional de Cuajimalpa, Jenny Saltiel, quien nunca objetó su construcción, a pesar de que ella misma reconoció que careció siempre de las licencias correspondientes. Durante 18 años funcionaron sin permiso.
La torre de American Tower fue construida en 1997, año que inició su trienio Saltiel; en tanto, la de Nextel se autorizó 25 días antes de que concluyera el mandato de la entonces delegada, pero al colocarse rebasó las especificaciones permitidas en peso y tamaño.
En un comunicado, tras los deslaves, American Tower informó que "los permisos están a nombre de SOS Telecomunicaciones porque esa era la compañía que construyó la torre en 1997. American Tower adquirió esta estructura en 2002 y los permisos con los que contaba dicha estructura son: licencia de construcción, que cuenta con el correspondiente estudio de mecánica de suelo, otorgada por Cuajimalpa".
La compañía indicó que la torre tenía un peso de 4.35 toneladas, sin embargo, cuestionado por El Financiero, el actual delegado de Cuajimalpa, Miguel Ángel Salazar, recordó que después de una búsqueda de la documentación de la torre, cuyo anclaje de tornillería y altura de 25 metros la volvían una estructura de cinco toneladas, se determinó que operaba sin permiso y de forma ilegal.
En 2007, el entonces director jurídico de la demarcación, Adrián Rubalcava, ordenó la demolición de la torre. El año pasado, ya como delegado, volvió a ordenar la demolición, sin embargo, en ambos casos, Carlos Rosete Herrejón, propietario del fraccionamiento, se opuso al desarme.
Tras el deslave, la delegación solicitó a American Tower toda la documentación que avalara la instalación de la torre, pero obtuvo como respuesta un oficio firmado por Silverio Ricardo Alvarado, representante legal de MATC Digital, S. de R.L. de C.V., donde detalla los trabajos para retirarla.
De acuerdo al dictamen técnico, elaborado por el perito en telecomunicaciones –acreditado por el Instituto Federal de Telecomunicaciones–, el ingeniero José Rodolfo Cerdán Peña: "La antena de telecomunicaciones y un contenedor con equipamiento de la empresa American Tower, en la zona de Santa Fe, tenía un peso de 11 mil kilogramos. Es decir, casi al borde del precipicio del talud había una carga de 11 toneladas".
En cuanto a la torre Nextel, que aún está en el mismo sitio, y que está a 20 metros del punto del colapso, la delegación encontró en sus archivos una licencia de construcción con Folio VI/604/00 expedida el 16 de agosto del 2000.
La licencia la autorizó Javier Vertiz, entonces subdelegado de Obras y Servicios Urbanos en la administración de Saltiel Cohen. Al momento de autorizar la licencia, no se percató de la torre de American Towers. Dos meses después, el nuevo jefe delegacional, Ignacio Ruiz (PRD), autorizó la construcción de esa antena, pero nunca la sancionó a pesar de que estaba autorizada para 15 metros –se hizo de 25–, rebasando las dimensiones autorizadas y de que a unos metros estaba la otra estructura.