CIUDAD DE MÉXICO. Enrique Horcasitas Manjarrez, exdirector del Proyecto Metro del Distrito Federal y responsable del diseño y construcción de la Línea 12, reconoció que la actual obra de la "Línea Dorada" no tiene remedio.
No obstante se deslindó de toda responsabilidad del colapso de este transporte y acusó a la Cámara de Diputados de dañar su "prestigio y reputación", con acusaciones "falsas" en un Informe "infundado".
En una carta que entregó al presidente de la Comisión Especial de la Línea 12 de la Cámara de Diputados, el priista mexiquense Marco Antonio Calzada, el excolaborador de Marcelo Ebrard advierte sobre la situación de los trenes:
"El FE10 no tiene una configuración adecuada para operar la Línea con costos de mantenimiento usuales y aceptables. Las modificaciones propuestas por Systra pueden mejorar la inscripción en las curvas, pero de todas maneras el tren no cumple con el diseño de la vía para la Línea 12".
"En términos de seguridad se pueden hacer todas las modificaciones propuestas por Systra al tren actual, con el objeto de obtener una mejor inscripción en las curvas. En nuestra opinión esto no resolverá completamente el problema de desgaste ondulatorio acelerado, ni los esfuerzos generados sobre los radios de curvas pequeñas".
Por ello envió una recomendación que señala: "Evaluar Ia posibilidad de cambiar el material rodante con una configuración de tren adecuada a Ia Línea 12 del Metro de Ia Ciudad de México".
En la misiva también anota que con la documentación que presentó a las diversas instancias "se desvanecen por completo las supuestas causas de responsabilidad que precipitada e irreflexivamente se me atribuyeron mediante el mencionado Informe", aunque –añadió- "ello resulte evidentemente inútil para reparar el daño causado al prestigio y reputación que con gran esfuerzo edifiqué durante más de 40 años de trabajo, por efectos del linchamiento mediático del que he sido objeto".
Se ha sostenido que la construcción de la Línea 12 implicó costos excesivos, haciendo mención a cifras falsas con el propósito fallido de aludir a la existencia de un desorden financiero. Nada más alejado de Ia realidad
Explica que "el monto acumulado de pagos entre los años 2007 y 2014
Ascendió a 22 mil 067 millones de pesos, cantidad que incluye el universo de contratos suscritos para la ejecución de la obra pública, así como de los servicios relacionados con la misma".
El exfuncionario –quien rechazó acudir a una reunión con los legisladores y sólo envió una carta- insiste que "durante el ejercicio de mi encargo como director general del Proyecto Metro del Distrito Federal mi conducta se ajustó en todo momento a los principios de legalidad, honradez, lealtad, imparcialidad y eficiencia que deben prevalecer en el servicio público".
Con ello, "el PMDF cumplió con el objetivo general y las atribuciones que le correspondían en términos del Reglamento Interior de la Administración Pública del Distrito Federal, debido a que en tiempo, forma y de manera eficiente, realizó la planeación, programación, presupuestación y construcción de la obra civil y electromecánica, incluyendo el sistema de vías, equipamiento y puesta en operación en estricta coordinación con el STC Metro".
Reitera que el Informe presentado por los legisladores –enviado ya a las autoridades judiciales- es "parcial, impreciso y notoriamente infundado, ya que se me atribuyó haber incurrido en actos u omisiones reprochables, sin existir causa justificada alguna para el efecto y sin darme la oportunidad de manifestar lo que a mis legítimos derechos correspondiera ni de exhibir pruebas al respecto".