RAMOS ARIZPE. Tres detenidos y 61 menores rescatados es el saldo de un operativo realizado en ranchos del sureste de Coahuila donde los menores laboraban en condiciones infrahumanas.
La denuncia de uno de los padres de los 61 menores, que se encuentran bajo resguardo de la Procuraduría de las Niñas, los Niños y la Familia, derivó en un operativo donde autoridades estatales detectaron y aseguraron dos predios donde se cree laboraban 200 personas entre ellas alrededor de 80 menores, aunque faltaría localizar a un 30 por ciento de ellos.
El operativo se desplegó en el municipio de Ramos Arizpe en la localidad conocida como Estación Higo, en el kilómetro 22 de la carretera Saltillo- Monclova, donde se ubican los predios El Pedregal y Santa Cruz, propiedad de la empresa coahuilense Prokarne, cuyo dueño responde al nombre de Oscar Lozano Chávez.
Ahí fueron detenidos Roberto Martínez García de 50 años de edad, Pedro Cisneros Rodríguez de 36 años de edad, y Juan Gerardo Castillo de 39 años.
La Procuraduría General de Justicia del Estado inició con la investigación correspondiente ante lo que podría ser el delito de trata de personas, sería canalizado a la Procuraduría General de la República.
"El enganchador, o sea la persona que los trae desde Hidalgo, desde Veracruz, es Camilo Hernández Hernández, quien en el momento del operativo huyó del lugar de los hechos, pero lo tenemos ubicado", aseguró el subprocurador de Investigaciones Especiales, Atención a Delitos contra Mujeres por Razón de Género, Trata de Personas, Libertad de Expresión y Servicios a la Comunidad, Liberto Hernández Ortíz.
De acuerdo a los testimonios de los propios menores, cuyas edades oscilan entre los ocho y los 17 años de edad, ellos se encargaban de seleccionar y empacar legumbres, actividad por la que recibían un pago diario de 100 pesos, en jornadas de las 8 de la mañana a las 5 de la tarde.
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Por las mañanas solo se les proveía de café y una pieza de pan por persona y durante el transcurso del día, de agua con sal, para evitar la deshidratación; la semana laboral era de lunes a domingo, día en que sólo trabajan mediodía; dormían en el piso, en colchonetas ubicadas en galerones que están aledaños a sus áreas de trabajo.
En los predios, para alrededor de 200 menores, la mayoría de sexo masculino, sólo había dos baños, uno para mujeres y uno para hombres y dos áreas de regaderas sin agua caliente; carecían de seguridad social o de algún servicio médico en sus áreas de trabajo y cuando alguno de ellos requería atención médica era trasladado al municipio de Ramos Arizpe a consultorios adscritos a farmacias.
Los menores son originarios de Tamaulipas, Veracruz, Hidalgo y San Luis Potosí, en donde son reclutados a través de anuncios en los medios de comunicación y trasladados en camiones hasta esta entidad; la mayoría manifestó tener entre uno y cuatro meses laborando, ya que son contratados por dos meses y al término de este período pueden ser recontratados.
La procuradora de los Niños, Niñas y la Familia, Yezka Garza Ramírez comentó que además de los 54 menores rescatados, también se encuentran bajo resguardo tres mujeres embarazadas que se dedicaban a la cocina dentro de este rancho y empacar legumbres; dos de ellas con hijos menores de brazos y la tercera con apenas dos meses de gestación.
Una de las mujeres viene en compañía de su marido que era una de las personas que entraba en contacto con la persona que reclutaba a los menores para traerlos a Coahuila, este grupo se encuentra bajo atención médica.
Los menores, según la procuradora, a simple vista no presentan maltrato físico alguno, sólo desnutrición, además de que se encuentran asustados.
El resto de los adultos que laboraban en el lugar se negaron a ser resguardados por la autoridad bajo el argumento de quedarse para que el propietario del rancho les pague su liquidación, derecho que será vigilado y asesorado de cerca por las autoridades de la Secretaría del Trabajo de Coahuila.