Mis Finanzas

Amor en tiempos de cólera… económica

Alberto Tovar tiene cinco recomendaciones para que las parejas puedan evitar conflictos relacionados con el dinero.

Los problemas económicos en ocasiones provocan reacciones contra los demás, por lo regular hacia quienes están a nuestro lado.

En la interacción en redes sociales me encuentro con frecuencia con el disgusto y con aseveraciones tales como "¡quieres que me organice con mis finanzas y no me alcanza para comer".

Esto mismo puede suceder con las parejas, por lo que es importante enfrentar las dificultades de dinero sin dañar la relación.

Hace algún tiempo presencié una discusión de un matrimonio, recriminándose sobre las decisiones de compra de sus artículos personales y el exceso de gasto que eso generaba. Es un hecho que este tipo de conflictos conducen en el extremo a la separación, y por esa razón es conveniente resolverlos.

Consideremos lo siguiente:

1.- Una máxima es que detrás de una molestia hay una petición escondida y si tenemos eso en mente, entenderemos que para dirimir las diferencias de pareja es bueno descubrir cuál es la solicitud. Si la presentamos en forma correcta, es posible avanzar.

2.- Es preferible acordar las reglas antes de que sean necesarias, porque de otra manera se elaboran en medio de una pelea, con resultados desastrosos.

Por eso la organización del dinero debe negociarse con tiempo y evitar hacerlo enojados. Así, cualquiera de los dos tiene argumentos con los compromisos previos.

3.- Independientemente de cómo se pongan de acuerdo, es recomendable que hagan un presupuesto conjunto en donde quede claro el uso de los recursos.

Es un camino para solventar el límite de los ingresos, fijar cuánto se quiere ahorrar y establecer metas, dependiendo de los sueños compartidos.

4.- La información es crucial y aunque sea doloroso conocer con detalle una problemática financiera, es mucho mejor que mantenerla en secreto porque ello impide arreglar la situación. Además del destino de los ingresos, saber los niveles de endeudamiento y los activos con que se cuenta para enfrentarlo.

5.- En la medida en que las percepciones lo permitan, se sugiere contar con una asignación de presupuesto individual para cubrir los gustos y preferencias de ambos. Ese margen de acción despresuriza la tensión.

Como ya he comentado en este espacio, la economía familiar crea una sinergia en el manejo de los recursos al ser una sociedad que se complementa, da contrapesos y construye una responsabilidad sobre el futuro. El reto es encausar el enojo para convertirlo en soluciones.

Alberto Tovar

Alberto Tovar

Economista, especializado en negocios y finanzas personales; certificado como coach de vida y equipos. Actualmente es el Director Regional de la Zona Norte de El Financiero. Ofrece conferencias, consultoría y coaching a organizaciones diversas.

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