Érase una vez un Número

'Where you stand, depends on where you sit'

Es claro que los economistas que están apoyando al candidato de Morena no están de acuerdo con algunas de sus propuestas más polémicas, pero “Where you stand, depends on where you sit”.

En el actual proceso electoral se han observado cambios de partido político como quizás en ninguna otra época; los que antes elogiaban una ideología hoy la critican, los que antes criticaban el programa de gobierno de un partido político hoy lo abrazan. Nunca más apropiada la frase de Rufus Miles "Where you stand, depends on where you sit", la postura que defiendas depende de la posición en que te encuentres. El origen de esa frase tiene que ver con un funcionario público que trabajaba en la oficina de presupuesto de Estados Unidos y donde, dadas sus responsabilidades, criticaba la actuación de una dependencia gubernamental, misma en la que le ofrecieron un trabajo con un mejor salario. Miles le dijo a un colega, "vas a ver como cambiará su forma de ver las cosas". El colega lo dudó dadas las convicciones y objetividad del funcionario que acababa de cambiar de trabajo. Miles respondió que la duda no era si cambiaría su posición sino cuándo esto sucedería; y así sucedió. Lo que estamos viendo en este proceso electoral es algo similar: miembros de campañas políticas que defienden a un candidato o partido político que antes criticaban, aunque para algunos no es fácil y pasan aceite tratando de justificar algunas posiciones.

Lo anterior pasa en todo el espectro de partidos políticos, no sólo por los cambios de personas entre partidos, sino también por las alianzas que se han formado entre partidos que tienen elementos de sus ideologías que no son transitables entre sí. Pasa también en todo el espectro de políticas públicas pero donde quizá sea más evidente es en el ámbito económico. Un claro ejemplo es un folleto de la campaña de Morena denominado 'AMLO: ¿Un peligro para México o un camino para México?', donde presentan una propuesta económica con elementos muy diferentes de los que escuchamos de parte del candidato, lo que refleja la dificultad que tienen los que están haciendo las propuestas económicas de la campaña para asimilar las posturas de AMLO.

La mayor parte del documento podríamos ponerla como copy-paste en los documentos de campaña de los demás candidatos. Quizá por ello en el mismo documento se presentan frases como: "Más que por su izquierdismo, algunos podrían criticar a López Obrador por suavizar cada vez más sus posturas o por aliarse con antiguos adversarios" o "...sus planteamientos de política económica son cada vez más moderados".

No obstante, existen en el documento elementos que reflejan la dificultad de los estudiosos de la economía partidarios de AMLO para ponerse una camiseta que no les queda. En la sección del sector energético, por ejemplo, no se señala nada relacionado con frenar la reforma energética o congelar los precios de los energéticos; pero incluso en temas con menor contendido de teoría económica y más de lógica de mercado, también les cuesta trabajo asimilar las propuestas del candidato. Me refiero específicamente a la propuesta repetida por AMLO una y otra vez sobre la construcción de dos refinerías.

En el documento se señala: "Se pretende incrementar la capacidad de refinación, a través de la reconversión de las refinerías existentes, así como la construcción de dos nuevas, si fuera necesario", es decir, tampoco están convencidos de este tema. En materia agropecuaria ni por asomo se señala lo de volver a tener precios de garantía o algún contenido relacionado con "producir todo lo que consumimos", menos aún del significado de esta propuesta en términos de limitar la apertura económica.

Es claro que los economistas que están apoyando al candidato de Morena no están de acuerdo con algunas de sus propuestas más polémicas, pero "Where you stand, depends on where you sit".

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