Debate Puntual

El destino de los independientes

Fernando Hernández Marquina analiza qué puede pasar con los presidenciables independientes luego de la resolución del INE de validar por ahora sólo las firmas de Margarita Zavala.

El viernes 16 de marzo, el INE dio a conocer que sólo una persona cumplió con los lineamientos establecidos para los ciudadanos que tenían la legítima intención de contender en el proceso electoral como candidatos independientes a la Presidencia de la República.

Por ahora, Margarita Zavala es la única candidata independiente que aparecerá en la boleta, tras lograr 870 mil 168 apoyos ciudadanos válidos, con una dispersión geográfica de 21 entidades. Armando Ríos Piter sólo alcanzó 242 mil 642 firmas verificadas, con dispersión de tres entidades. Jaime Rodríguez Calderón, 'El Bronco', tuvo 835 mil 511 apoyos válidos, pero con una dispersión de 17 estados, 4 entidades menos que las establecidas. En el camino quedaron ciudadanos como Marichuy Patricio y Pedro Ferriz de Con.

Durante el proceso, algunos de los candidatos independientes presentaron quejas y "denuncias", tratando de descalificar la aplicación que documentaba el apoyo ciudadano y la recolección de firmas, por lo que el INE informó de manera oficial y oportuna que los participantes que buscaban el registro realizaron algunas actividades irregulares, como la presentación de firmas inválidas, falsas o repetidas, y de la inusual entrega de fotocopias de credenciales adulteradas con las que acreditaban el apoyo ciudadano.

Justamente por las razones antes descritas, las autoridades del Instituto electoral determinaron que ni Ríos Piter ni 'El Bronco' estarán en posibilidades de aparecer en la boleta. A los aspirantes independientes inconformes con la decisión del INE les corresponden 5 días para presentar sus inconformidades y demostrar que están en condiciones de participar en el proceso electoral.

Es importante resaltar que el hecho de que un ciudadano participe, sin partido político, como candidato a la Presidencia de México es un hecho sin precedentes en la historia reciente de nuestro país, y es un mecanismo que fortalece, sin duda alguna, nuestro aparato democrático.

Queda una incógnita importante en el aire: ¿cuál es el destino para los independientes?

El caso de El Bronco es particular. Inició este proceso decepcionando a los ciudadanos que lo llevaron a la gubernatura de su estado, siendo su principal promesa "no ser un Chapulín, que brinque a otro puesto". Todavía, se atrevió a asegurar: "Yo voy a concluir primero mi responsabilidad con Nuevo León". Hace poco, el propio Bronco aceptó que había mentido a los neoloneses cuando le recordaron que había prometido no abandonar el estado para buscar la Presidencia. "También le dije a mi esposa que la iba a llevar al cine y no la he llevado", respondió sin temor a la crítica. ¿Regresará a un estado al que engañó y al que tampoco le podrá ofrecer ni un premio de consolación al fallar en obtener la gran victoria electoral? ¿Qué hará con los bajos niveles de aprobación de su gobierno y el recelo de aquellos que creyeron que un independiente resolvería fácilmente los problemas de la entidad?

La historia de Ríos Piter se antoja menos compleja: podría regresar a la Cámara Alta a buscar un grupo político que lo respalde. En un lugar muy distinto de la historia, Margarita Zavala celebra su primera batalla ganada. Ha sido congruente, respetado el proceso y, sobre todo, cumplió con lo establecido por el INE para esta primer etapa.

Con las elecciones tan cerca, los ciudadanos debemos exigir que quienes contienden a la Presidencia sean personas íntegras en su apariencia y en su proceder, que sepan respetar las reglas establecidas y que presenten propuestas viables para favorecer al país; que eviten la demagogia en todo momento y se abstengan de ofrecer respuestas mágicas, mesiánicas, para los problemas que enfrentamos. En nuestras manos está promover un Debate Puntual sobre cómo fortalecer las candidaturas independientes y la importancia de que éstas se logren de forma honesta, sin alteración o compra de firmas; llanamente: sin trampas, y que estén dispuestos a respetar los resultados y aceptar la derrota, en caso de no ser favorecidos por la decisión de la mayoría de los mexicanos.

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