José Antonio Meade está ya en un franco segundo lugar en nuestras encuestas, aseguran priistas cercanos al candidato, quienes comentan que si al iniciar la campaña presidencial logran estar a siete puntos del puntero Andrés Manuel López Obrador, el triunfo será del priista.
Sin embargo, por obviedad, acotan que esto será difícil de analizar para la población en general porque las encuestas tienen datos muy diferentes.
Y comentan que si no logran crecer hasta ese límite, lo más seguro es que el voto del PRI se vaya con López Obrador, ya que los priistas no votarán por quien los acusó de corruptos: Ricardo Anaya.
Claro que afirman que el escenario será diferente al de 2006, porque no habrá una movilización a favor de López Obrador, como sí sucedió a favor del panista Felipe Calderón.
Y finalmente hay mucho de cierto en ese comentario, porque Morena es muy parecida al PRI histórico y muchos militantes del tricolor se ven más reflejados en ese viejo PRI, incluso que con sus dirigentes actuales.
Esta decisión de los priistas puede darse independientemente de si crece o no su candidato, ya que con los años las propuestas del tricolor se fueron pareciendo cada vez más a las del PAN.
O sea que si vemos que el gobierno federal ataca mediáticamente al candidato de la coalición Por México al Frente, Ricardo Anaya, después de iniciada la campaña, podremos estar convencidos de que dejarán libre la llegada del candidato de la coalición Juntos Haremos Historia, Andrés Manuel López Obrador.
Claro que en el equipo del aspirante de la coalición Todos por México, Meade Kuribreña, están seguros de su triunfo. La senadora Ana Lilia Herrera, quien es coordinadora de evaluación del equipo del candidato, asegura que quienes no lo creen es porque todavía no conocen al candidato o no reconocen la fuerza del PRI, que tiene estructura en todo el país, mientras que Morena ni siquiera logró tener representantes en todas las casillas del Estado de México.
Asegura que los priistas lo han ido conociendo y reconociendo y están convencidos de que ha sido un excelente administrador público, que se ha conducido con estricto apego a la ley, además de que es el candidato con menos negativos.
A Ricardo Anaya lo califica como un político que utilizó descaradamente a su partido para hacerse de la candidatura y de López Obrador señala que hasta se creó su propio partido para contender.
Y comenta que "mientras unos utilizan el enojo social y la ocurrencia como plataforma, quienes apostamos por José Antonio Meade vamos por un México con certidumbre donde -encabezados por su experiencia, integridad y capacidad- logremos que el esfuerzo de cada familia se traduzca en empleo; en recuperar la tranquilidad, y en oportunidades para erradicar la desigualdad".
Los priistas siguen optimistas, los demás no vemos el mismo panorama, pero en definitiva todavía no empiezan las campañas y todo puede ocurrir, incluso el apoyo del PRI a López Obrador.
PRD crece en San Luis Potosí
A quien se le están complicando las cosas es al gobernador priista de San Luis Potosí, Juan Manuel Carreras, pues a la inseguridad se suma una crisis política que poco ayuda a los candidatos de su partido y se verá reflejado en los próximos comicios de julio, ya que las encuestas locales lo ubican en tercer lugar de las preferencias.
Si no logra cambiar las cosas tendrá que gobernar con un Congreso local y por lo menos 30 alcaldes del PRD, además de senadores y diputados federales que no legislarán a su favor y qué decir de cómo le irá en la aprobación del presupuesto.