La Nota Dura

¿Y el deporte en México?

Los gobiernos responsables han encontrado en el deporte un vehículo fundamental para mejorar la salud emocional, espiritual y física de sus sociedades.

No recuerdo un posicionamiento serio por parte de los candidatos presidenciales respecto a su concepción del deporte. La única referencia que me viene a la mente es aquella beisbolera de López Obrador, en la que afirmaba que él seguía bateando arriba de .300 y alguna respuesta –que, en realidad, esa sí no recuerdo– de José Antonio Meade, y nada más. Tampoco vi una preocupación por parte de los medios para presionarlos a ahondar en el tema, lo que sí recuerdo es una lúcida columna en este diario del periodista Mauricio Mejía, publicada el pasado 3 de abril y titulada "Sin deporte no hay democracia". En ella, Mejía explicaba la importancia de la cultura deportiva en la construcción de una sociedad, aquí un fragmento: "La práctica deportiva reconoce la igualdad de los competidores, el respeto a las reglas del juego y a los árbitros de las contiendas; fomenta la disciplina, la ética (ese hábito del que habló Hannah Arendt) y el respeto por el cuerpo y la mente; por si fuera poco, propicia la colectividad, el objetivo común y la solidaridad. Los gobiernos responsables han encontrado en el deporte un vehículo fundamental para mejorar la salud emocional, espiritual y física de sus sociedades. Los gobiernos mexicanos, del partido y del nivel que sea (municipal, estatal y federal) han sido groseros con esa elemental exigencia de los ciudadanos, cuyo anhelo último y principal es la felicidad, con lo abstracto y discutible que pueda resultar el término". Así de relevante es, y un par de semanas después de las elecciones insisto en la época de las definiciones.

Hace unos días tuve la oportunidad de hablar con la senadora con licencia Ana Gabriela Guevara, quien es la propuesta formal de Andrés Manuel López Obrador a dirigir la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte, aunque afirma no tener aún la plataforma completa, porque dice que le quedan pendientes algunas reuniones con el que será el próximo secretario de Educación Pública, Esteban Moctezuma, sí es importante ir delimitando lo que tiene en mente, primero el diagnóstico de lo que recibe: "Yo creo que la Conade no transita hacia lo que debe ser, la Comisión tiene que convertirse en el ejecutor de la política social deportiva del país y no en el rector a distancia donde los institutos del deporte hacen lo que quieren, las federaciones hacen lo que quieren, y no hay una cohesión para decir a dónde queremos transitar con este paquete que se llama deporte nacional, que incluye lo social, lo comunitario, en lo estudiantil, en los selectivos, en las selecciones nacionales, de cara a Juegos Olímpicos. La visión en la que está López Obrador es, ¿cómo masificamos y cómo logramos meter a la ciudadanía en esta dinámica?"

Y habrá que revisar también la manera en la que países como China y Japón han desarrollado su cultura deportiva, porque son los ejemplos que Guevara pone cuando imagina el futuro de este país, hacia allá quiere transitar. Sin embargo, ante la pregunta de ¿por qué son ejemplos?, la medallista olímpica señaló la "empatía a la patria" como la fortaleza de estos países. Vaya que queda a deber su respuesta.

No será hasta que tengamos formalmente un plan deportivo que podremos evaluar las políticas del gobierno entrante. Sin embargo, es momento de presionar a las autoridades para que lo dejen de poner hasta el final de sus prioridades. Es ahí donde se construye sociedad, desde lo lúdico se plantea un horizonte distinto para esa generación que viene y que está inundada de violencia y futuros inciertos. La puerta del deporte sirve como prevención, pero también como motor de un cambio que nos han vendido desde hace varios meses.

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