Parteaguas

Él 'uberizó' la producción de carne en México… antes de que naciera Uber

Un sistema de compra a productores independientes, similar a lo que hace la proveedora de transporte, impulsó el crecimiento de Sukarne.

Ubiquémonos en la zona de carnicería de cualquier supermercado, ahí en donde está la arrachera marinada empacada, lista para asar. ¿Cómo llegó ese manjar ahí?

Apenas había pasado un año desde los Juegos Olímpicos del histórico año de 1968, en México.

Doña María Calderón y su esposo, Isabel Vizcarra, empezaron el negocio ganadero frente al rastro municipal de Culiacán, Sinaloa.

Hoy su hijo, Jesús Vizcarra Calderón, es responsable en buena medida del boom que vive México en el negocio de producción de alimentos.

Su empresa, Sukarne, vende más de 45 mil millones de pesos anuales, dos tercios de las ventas de Grupo Maseca, para tener una idea de esa magnitud. Eso vendió en 2016, pero probablemente 2017 lo cerró por arriba de 50 mil millones.

Tiene lógica si consideramos que en 2015 vendía todavía menos de 40 mil millones y cinco años antes la mitad de esa cantidad. Su ritmo es difícil de medir.

Dos citas del centro de análisis privado Grupo Gea sintetizan la circunstancia de Vizcarra, hoy Sukarne equivale a:

Un 40 por ciento del total de la rama de matanza, empacado y procesamiento de carne de ganado bovino, aves y otros animales comestibles. Sus ventas representan ya 4.0 por ciento del valor de la industria alimenticia en su conjunto. Los datos están consignados en el estudio 'Sector agroalimentario, motor de desarrollo económico'.

¿Qué sistema presume Sukarne?

El de compra de ganado a productores independientes. Esos animales no nacen ni crecen en su granja, sino en las de ganaderos distribuidos por todo el país.

Son ellos quienes se encargan de cuidarlos cuando becerros y cuando los animales crecen, estos pequeños empresarios tienen en Sukarne un seguro comprador de su producto.

En posesión de Sukarne los animales engordan con alimento nacional e importado, de ahí que el sistema no se limite a la adquisición de ganado. Cuenta también con seis mil 733 productores de granos, algunos de ellos son dueños de sólo una hectárea de terreno. A ellos que son sus proveedores, la empresa otorga crédito y otros servicios financieros, en una eficiente cadena de economía colaborativa, como la de Uber, nacida en 2011.

El volumen de compra de Sukarne es enorme. En 2016 compró un millón 37 mil cabezas, 5.0 por ciento más que en 2015.

Después de que los padres de Jesús Vizcarra abrieron el negocio en aquel lejano 1969, varios pasos empujaron su empresa hasta la plataforma en la que se ubica hoy.

En los noventa llegaron inversiones de fondos gubernamentales y de Darby, la filial de Franklin Templeton, además de otro fondo, Baring.

En 2000 comenzó el negocio internacional importando reses de Estados Unidos y exportando a Asia.

México es ya una economía grande en la que caben varias realidades. Mientras el Producto Interno Bruto nacional pelea por avanzar a 2.0 por ciento anual, el sector agropecuario crece al doble de esa velocidad.

¿Qué lo jala? La tremenda producción nacional de cerveza, de aguacate, de berries y ahora, de carne, en la que figuran Grupo Bafar, Kuo, con Kekén, y obviamente, Sukarne.

Poco hablan los precandidatos de este tema y más nos vale estar al pendiente de que ninguno meta mano en un mercado que comienza, finalmente, a funcionar.

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