He Dicho

El injusto maltrato a la final

Me parece ridículo e injusto que la final del futbol mexicano con los 2 equipos más regulares de la temporada esté pasando desapercibida, escribe Miguel Gurwitz.

Ciertamente había gran curiosidad por conocer la lista de convocados de Juan Carlos Osorio más allá de no esperar grandes sorpresas, pero de eso a que la final del futbol mexicano esté pasando desapercibida, me parece francamente ridículo e injusto.

Injusto porque hablamos de los dos equipos más regulares de la temporada, uno que terminó el torneo anterior en el sitio 14 de 18 y que con gran serenidad logró estabilizar un grupo de futbolistas para llevarlos a la estancia final: hablamos de Santos, obviamente.

Del otro lado un proyecto más solido en los últimos torneos que confirma que las cosas en Toluca se han manejado bien.

Ambos modelos de trabajo son serios, estables, profundos y de extraordinaria ejecución tanto administrativa como deportiva. Similares estilos en cuanto a la discreción con la que se manejan, los valores que transmiten y con filosofías de trabajo que si bien pueden encontrar diferencias entre una y otra, ambas han sido exitosas.

A la directiva de Santos y Toluca habremos de agradecerles que se hayan atrevido a refrescar la baraja de entrenadores; de apostar por algo diferente, por algo nuevo. Por haberse animado a brindar nuevas oportunidades para encabezar sus proyectos.

Establecemos sin empacho que la presencia de Hernán Cristante, ya con algunos torneos en el circuito mayor, así como Robert Dante Siboldi, ambos porteros históricos de nuestro futbol, ha sido un acierto.

La genética de ambos es ganadora, así lo marca su exitoso camino en torneos cortos. Su presente es fantástico colectiva e individualmente, por lo mismo no deberíamos ser tan injustos en la difusión que estos dos equipos merecen.

Ahora, seríamos falsos e hipócritas (hablo de la gran mayoría), si decimos que teníamos en el radar a estos dos como posibles finalistas, no lo hicimos al inicio de la Liguilla y mucho menos cuando arrancó el torneo.

Alejemos del populismo y acerquémonos a la sensatez futbolística que estos dos nos han entregado en el semestre, si lo hacemos, nos encontraremos con una Final grandiosa, justa, y que podría resultar espectacular.

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