Incómoda, inservible e intrascendente. Con ustedes, la 'Campeones Cup'... desde el nombre ya empezamos mal.
Este afán de vender lo que sea y como sea está dando un golpe de realidad, ese que indica que el público en Estados Unidos ya no compra cualquier cosa ni se conforma con lo que le den, y eso lo deben entender tanto la Liga MX como la MLS.
Si bien es cierto que el futbol aún encuentra muchas áreas de oportunidad y crecimiento en el país vecino, cierto también es que ya hay una base lo suficientemente sólida y estructurada que les permite iniciar su proceso de selectividad, y eso de la 'Campeones Cup' no es atractivo. Y me atrevería a decir que ni siquiera a los equipos les debe despertar gran interés; claro, cumplen, juegan, intentan ganar y listo.
El momento de la entrega del trofeo dice mucho de lo que este partido representa. El guango festejo es síntoma inequívoco de que el juego sale sobrando, y mire que era el primer título internacional para Tigres (ok, broma).
Para los equipos resulta incómodo ya que ambos torneos están en marcha, más aún cuando tres días después se tiene que jugar un Clásico como es el caso de Tigres. No quisiera pensar en el escenario que alguno de los futbolistas del Tuca salga lesionado por un jugar un partido de estas moleras características.
El nombre es patético, la fecha incómoda, el significado nulo, el nivel pobre y el espectáculo inexistente.
El público en Estados Unidos dejó de ser el cliente noble y leal de antes. Sabe que puede exigir algo de mayor calidad, de tal forma que si el único objetivo de estos partidos es ganar dinero, la cosa se va poner complicada.
Menos partidos y competir más, a otro nivel, de eso se trata.