La Fiesta Está Viva

Otra resurrección

Pasión Ganadera, señala Rafaél Cué, ha entrado a rescatar una plaza con idiosincrasia propia como lo es la Silverio Pérez de Texcoco.

Pasión Ganadera es una empresa taurina joven, con menos de 10 años operando en el circuito taurino mexicano; su primer gran proyecto fue tomar las riendas de la plaza de Pachuca en 2010. La Monumental Vicente Segura en la capital hidalguense es una importante plaza de toros en la zona centro de nuestro país. Por aquellos años el descrédito le llegó de manos de empresarios cortoplacistas con poco respeto por la fiesta, enfocados en la cantidad, mas no en la calidad ni seriedad. Obviamente no se puede generalizar, pero es evidente que el aficionado y el público feriante se alejaron de los tendidos; sin embargo en seis años de gestión, Pasión Ganadera le devolvió el crédito y la seriedad, no sin tropiezos y tardes complicadas, como es natural, pero al final del camino Pachuca brilló de nuevo en el calendario taurino nacional, como una plaza manejada con verdad, honradez y pasión por la fiesta brava. Tristemente, con el cambio de gobierno los destinos cambiaron, y en sólo dos años el resultado es lamentable.

Lo mismo pasó con la plaza Silverio Pérez, de Texcoco; pasados los años de gloria, cuando don Antonio Ariza creó la Feria Internacional del Caballo —visita obligada para texcocanos y capitalinos en otras décadas—, la gestión taurina del coso sufrió múltiples cambios de manos: oportunistas, taurinos de muy baja categoría, incluso hasta verdaderos pillos de la economía taurina; obviamente hubo esfuerzos loables, pero sin la certeza de la continuidad, la misión fue prácticamente imposible.

Pasión Ganadera ha entrado al quite, a rescatar una plaza con idiosincrasia propia, con importancia por la cercanía a la capital, hoy a escasos 20 minutos del aeropuerto capitalino, y con una tradición que vale la pena el esfuerzo.

El año pasado se notó el cambio y la inversión en el coso: baños nuevos, limpieza, seguridad dentro de la feria y de la plaza, así como un ambiente propositivo de respeto y amor por la tauromaquia como su sello empresarial.

En los carteles, lo mejor de la baraja, con toques internacionales y siempre la presencia del toro garantizada. Texcoco debe de ser un rescate de todos, no sólo de la empresa, a la que se le agradece la infinita voluntad y tesón de trabajar a favor de la fiesta de los toros, invirtiendo recursos, planeación, tiempo y quizá lo más valioso: demostrando verdadero amor por nuestras tradiciones.

Este año se han programado cuatro festejos taurinos, en tres de ellos lo mejor del rejoneo: Pablo Hermoso de Mendoza y Jorge Hernández como matadores a caballo, y la presentación del joven y talentoso Guillermo Hermoso de Mendoza, en corrida mixta, ya que el menor de la saga no tiene aún alternativa.

A pie, intensos mano a mano entre parejas de toreros de corte distinto y misma garra: Joselito Adame y Sergio Flores se midieron el Viernes Santo, Juan Pablo Sánchez y Arturo Salivar el Sábado de Gloria, y para este próximo domingo 8 de abril, lo harán el galo Sebastián Castella y el hidrocálido Arturo Macías, abriendo el festejo Jorge Hernández, acompañado de los Forcados Mexicanos (que celebran 40 años de fundados), ante toros muy bien presentados de Torreón de Cañas.

La empresa ha hecho lo suyo, los toreros han aceptado este interesante formato, han salido a arrimarse con verdad, brindado emociones a los presentes, que este año han incrementado notablemente su asistencia, dando un voto de confianza bien ganado a Pasión Ganadera.

Lo invito a sumarse, a hacer que las cosas pasen. Si es usted aficionado, vamos a Texcoco este próximo domingo al cerrojazo de la Feria 2018, invitemos a gente no necesariamente aficionada, a conocer de primera mano la tauromaquia en un ambiente seguro, familiar, con cartelera de máxima calidad. Como público hagamos lo nuestro, llenemos la plaza y con eso cubramos todos los flancos de la defensa de nuestra pasión. Precios muy accesibles, buenas instalaciones y el espectáculo único e irrepetible de una corrida de toros. Allá nos vemos.

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