CHILPANCINGO, Gro.- El ahora exsecretario de Salud en Guerrero, Lázaro Mazón Alonso, aclaró que no ha sido llamado a declarar por la Procuraduría General de la República o por la Subprocuraduría Especializada en Investigación contra la Delincuencia Organizada (SEIDO), como se dio a conocer en algunos medios luego de que renunció al cargo.
"Yo no respondo por familiares, amigos ni compañeros por su comportamiento; estoy con la frente en alto y no tengo nada de qué avergonzarme", reiteró Mazón Alonso, quien pertenecía al equipo de trabajo del gobernador Ángel Aguirre Rivero.
La aclaración del exfuncionario tiene que ver con los comentarios que hizo del gobernador ayer en una conferencia de prensa, en el puerto de Acapulco, donde afirmó que le pidió su renuncia para que pudiera acudir a las instancias legales correspondientes y explicara la relación que tenía con el ahora exalcalde de Iguala, José Luis Abarca, prófugo desde el 30 de septiembre pasado.
Cuestionado sobre el rumor de que le solicitaron su renuncia por presión del Comité Directivo Nacional del PRD, el también exsenador dijo desconocer si así fue.
En cambio, explicó que "probablemente" su destitución se deba a las simpatías que han mostrado algunos líderes políticos y de organizaciones sociales por sus aspiraciones de ser candidato a gobernador por el partido Morena.
Luego de la separación de ese cargo, mencionó, "haré un alto y tendré tiempo para dedicarme a temas políticos. Soy muy inquieto y seguramente estaré trabajando en algunos proyectos en poco tiempo".
De manera extraoficial se sabe que a la salida de Lázaro Mazón llegará como titular Pablo Zapien Cortez, quien era subsecretario de la misma dependencia.