El nuevo comercial de ESPN para celebrar la fiesta mundialista es un homenaje para los fanáticos de todo el planeta, con escenas como el niño de Guadalajara que tiene que conectar una extensión de una casa a otra para ver el juego o el joven ruso que debe escabullirse de casa para ir con sus amigos para disfrutar el partido.
La marca de hamburguesas buscó a niños, jóvenes, ancianos y chicas que fueran los amos del balón, capaces de hacer los trucos más increíbles como anotar un golazo a través de la ventana de la vecina en el segundo piso, dominar la pelota en un diminuto vestido de coctel o pararse de la silla de ruedas para dejar boquiabierto a un público callejero. La iniciativa incluye un video, un sitio web y una app para interactuar con nuevos diseños en sus empaques de papas fritas.
En un avión de Emirates, dos pasajeros se dan cuenta de que están frente a una leyenda y susurran “debe ser el mejor jugador de su generación, debe ser el mejor de la historia”. Cristiano Ronaldo esboza una ligera sonrisa por los halagos, hasta que escucha la frase “es decir, ganar tres Copas del Mundo”. El portugués voltea y se encuentra con el Rey Pelé.