Desde niño, el bajo eléctrico y él fueron uno. Ya en la adolescencia se entendía mejor con uno de su tamaño: el contrabajo. Dos instrumentos que han trazado su vida en la trinchera de las notas graves. Desde ahí, John Patitucci ha trascendido al revolucionar la manera de atacar las cuerdas, con una importante influencia en el universo del jazz.
Pero no es sólo virtuosismo lo que define su forma de tocar, sino la musicalidad como tal. Una característica que lo ha llevado a alternar con los más importantes músicos de la contemporaneidad, como el pianista Chick Corea, quien a mediados de los 80 lo invitó a formar parte de sus Electric y Akoustic Band. Esta experiencia le ganó reconocimiento mundial, dos premios Grammy y ocho nominaciones, distinciones a las que se sumarían muchas otras. La más importante, quizá, formar parte del núcleo musical del legendario saxofonista Wayne Shorter, con quien saldrá de gira en octubre próximo.
___Han tocado por muchos años con Shorter, ¿qué les motiva a Danilo Pérez (piano), a Brian Blade (batería) y a ti a formar el trío Children of the Light?
___Formamos el proyecto apenas este verano. Queríamos continuar el legado que nos dejó Wayne. Él tiene 81 años y no sé qué tanto quiera seguir de gira. Estamos planeando hacer conciertos con él y estaremos disponibles para cuando quiera tocar. Valoramos su espíritu, ¿sabes?
___¿Qué tan diferente es tocar con Shorter y sin él, con el mismo equipo?
___Él es un músico heroico y una padre musical para todos nosotros, pero ya habíamos tocado y grabado juntos como trío, incluso antes de grabar con Wayne. Yo he tocado con él desde los 80: cuando grabábamos el disco Alegría (2003), Danilo se incorporó a medio proyecto y después Brian. Él nos ha inspirado, tocamos su música, pero en este proyecto también tocamos composiciones nuestras.
___¿Hay más libertad?
___La misma. Wayne siempre nos dio la oportunidad de expresarnos, sólo son formas distintas de hacerlo. Aquí todos somos líderes de banda, y yo toco tanto el bajo eléctrico como el acústico. Vamos a tocar un poco del nuevo disco de Danilo -algunas piezas yo las escribí-; obras de Wayne y otras de Brian. Tocamos lo que nos place, somos como una familia.
___¿Planean grabar un disco como Children of the light?
___Definitivamente tiene que pasar, no sé cuándo.
___Estás grabando un disco propio desde que salió el último hace cinco años...
___Sí, Brooklyn. Saldrá en noviembre próximo. Brian Blade estará en la batería, Adam Rogers y Steve Cardenas en las guitarras y yo en el bajo eléctrico. Este disco es una expresión del lugar de donde provengo y de las influencias de mis héroes de juventud, con piezas de mi autoría; con una manera de usar los instrumentos eléctricos de forma orgánica, sin que sea fusión o caer en un determinado género.
___¿Por qué pasaron cinco años?
___Es una historia complicada, pero básicamente es que las disqueras quisieron dejar de grabarme. Pero bueno, quiero más libertad y las compañías no me ofrecen eso, los contratos no dan mucha libertad. Por fortuna hoy conozco mucha gente que está dispuesta a grabar con toda la libertad. No sé cuándo salga mi disco a la venta porque desconozco en qué disquera me voy a quedar. Tal vez sea independiente.
___¿En qué instrumento te sientes más cómodo, ¿en el bajo acústico o eléctrico?
___Los dos forman parte de mi personalidad, son colores distintos de mí. Toco mucho el bajo acústico en Nueva York, pero cuando viví en la Costa Oeste hace 18 años, la gente me percibía más como bajista eléctrico. Hay épocas en que toco más uno u otro. Ahora estoy en un periodo en el que quiero crear y decir algo nuevo en el eléctrico, si puedo.
___Eres profesor en Berklee. ¿La enseñanza te ha permitido entender la música de manera más profunda?
___Claro, es un reto a la creatividad para encontrar la mejor versión de tus alumnos, extraer su potencial. Pero también sucede que al intentar resolver algo, aprendes de tus alumnos.
___¿Dónde te ves en los próximos 10 años?
___Haciendo más cosas con el trío, grabando. Y trabajando con mis hijas; una de ellas, de 16, es cantautora y está en el camino.